‘Me divorcié: más pudo la mamitis de él’
Amigos. Les cuento cómo logré solucionar mis problemas. El principal era con mi esposo, ya que siempre sufrió de mamitis. Cada vez que se levantaba de dormir, en lugar de lavarse los dientes o vestirse en nuestra casa, lo primero que hacía era encender el carro e irse a la casa de sus padres para vestirse allá, que su mamá le diera el desayuno, y de ahí se iba a trabajar. Este comportamiento era intolerable, hasta que un día decidí hablar con seriedad con él y mi suegra juntos.
Al principio ambos comprendieron mi posición, y él intentó, por dos semanas, no ir a la casa de su mamá, pero no funcionó. Sin embargo, yo decidí que no quería seguir viviendo de tal forma, así que busqué ayuda psicológica para poder liberarme de esa situación que me tenía agobiada constantemente y que no me permitía ser feliz, menos pensar en la posibilidad de tener hijos con él. Intenté mantener mi hogar, pero más pudo la mamitis de él. Me divorcié y ahora estoy tranquila.
Lorena,
Guayaquil