El regreso de Thor: Arrasando con todo

Por Harpo
19 de Noviembre de 2017

“Se destaca  por ese balance entre la acción y la comedia. Es grato descubrir a su protagonista no solo como  estrella de acción, sino como un comediante”.

El australiano Chris Hemsworth protagoniza Thor: Ragnarok.

OJO: INCLUYE ‘SPOILERS’

Los superhéroes ya son protagonistas regulares en el cine, con cada una de sus películas podemos soñar con un salvador o salvadora en quien confiar cuando los villanos más inimaginables quieran destruirnos, conocemos mundos nuevos, nos maravillamos con sus habilidades extraordinarias. Y todo eso está perfecto porque cuando vamos al cine, a veces solo queremos divertirnos y por un par de horas pensar que esos mundos de fantasía son reales. Thor: Ragnarok es una magnífica oportunidad para este cometido.

La historia de esta película es la siguiente: Thor (Chris Hemsworth) regresa a su planeta Asgard para evitar el Ragnarok (destrucción total), solo para darse cuenta de que su hermano Loki (Tom Hiddleston) se ha tomado el poder. Thor prácticamente lo lleva a buscar a su padre y tras un breve paso y encuentro con el Dr. Strange (Benedict Cumberbatch) en Nueva York llegan hasta Noruega, donde se encuentra Odín (Anthony Hopkins) y descubren que tienen una hermana, Hela (Cate Blanchett), quien destroza el famoso martillo de Thor y quiere volver a Asgard para desde ahí controlar todo el universo.

Cuando los hermanos intentan detener a la villana, se desvían del camino y terminan en el planeta Sakaar, donde Thor se convierte en una especie de gladiador romano y tiene que competir nada más y nada menos que contra Hulk (Mark Ruffalo). Aquí, Thor no solo es sometido a un corte de pelo, sino que debe convencer a su verde amigo de que vuelva con él a Asgard y lo ayude a detener a Hela.

La película tiene todas las secuencias de acción y efectos especiales que uno pudiera esperar de este tipo de producciones, pero además es una gran comedia, lo cual es un gran acierto ya que ha habido casos en los que las películas de superhéroes se toman demasiado en serio y se tornan en historias pesadas y densas (sí, estoy refiriéndome a tus últimas películas DC Comics). Marvel se ha destacado por brindarnos, con mayor y menor éxito, historias que sin dejar de lado los problemas y dudas existenciales que tienen muchos de sus protagonistas, son digeribles, ligeras, entretenidas y asimilables por toda la familia. A los puristas de los cómics esto tal vez les pueda molestar, pero vamos, que estos no son cómics, son películas que pretenden atraer al mayor número de público.

Thor: Ragnarok se destaca especialmente por lograr este acertado balance entre la acción y la comedia. Es grato descubrir a su protagonista no solo como una gran estrella de acción, sino también como un comediante, algo de lo que ya nos había dejado ver un poco en la nueva versión de Cazafantasmas. Si aún no la han visto, Thor: Ragnarok es una muy buena opción para disfrutar en familia. Dicen por ahí que las comparaciones son odiosas, pero actualmente, por lo menos para el autor de esta nota, Marvel le está ganando la batalla a DC en el mundo cinematográfico. Habrá que ver qué sucede ahora con el estreno de La Liga de la Justicia.

Como un seguidor de las películas de superhéroes, y subrayo la palabra películas –no cómics–, espero que La Liga de la Justicia. realmente sorprenda por el bien de todos los que somos fanáticos de estas historias. La Mujer Maravilla ya nos dio un soplo de esperanza de que DC puede hacer mejor las cosas y además no podemos olvidar la excelente trilogía de Batman, el Caballero de la Noche, pero por el momento, Marvel lleva la delantera. (O)

ojosecosec@gmail.com

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