Alergia al sol

La radiación solar puede en algunas personas causar problemas. Es necesario descubrir qué la origina.

Es posible que no lo crea, pero sí. Existen ciertas personas que cuando están en contacto con el sol empiezan a sufrir no solo de picazón o rojez, sino de hinchazón,  provocada por la alergia al sol y por fotosensibilidad, que en la mayoría de los casos es por fármacos.

Según la dermatóloga Blanca Almeida Jurado, este padecimiento depende de la causa que lo produzca. En los adultos, la mayor parte de los casos, se trata de una reacción de fototoxicidad (reacción de sensibilidad ante el sol) generalmente debido a fármacos, cuya lista es bastante extensa.

En otros, agrega, son provocadas por fotoalergia (reacción de hipersensibilidad retardada) en la que interviene un mecanismo inmunológico.

En cambio, en los infantes, el problema con el sol está más relacionado con antecedentes de atopia (asma, rinitis, dermatitis, entre otras enfermedades alérgicas), y en ellos sería más una intolerancia al calor del sol.

También se conoce que tanto la fototoxia como la  fotoalergia pueden estar desencadenadas por perfumes, ciertos aditivos que están en los alimentos, colorantes usados en cosméticos, tatuajes, pruebas de laboratorio y aun en ciertas cremas protectoras solares. No solo el ácido paraaminobenzoico (PABA, por sus siglas en inglés), el cual ya no se lo utiliza en los protectores solares.

Reacción y diagnóstico

En los adultos y en los niños, el cuadro de fototoxia puede manifestarse en minutos y el de fotoalergia en horas, pero con reacciones de tipo eritema (rojez), hinchazón  y en casos extremos vesículas, simulando una quemadura, acompañada de picazón, generalmente en áreas expuestas a la luz solar.

Estas, dice Almeida, se pueden diagnosticar   con la historia clínica y con biopsia. Incluso, en algunos países se usan el fototest y el fotoparche para descartar fotoalergenos concomitantes, es decir, no siempre es una sola la causa de la alergia, sino que puede haber más sustancias que interactúan produciendo agravamiento del cuadro clínico. “Pero estos últimos no los tenemos a nuestro alcance, de manera rutinaria”.
Según la dermatóloga Elizabeth Benites, el fototest consiste en exponer una zona de piel de la espalda a dosis bien definidas de radiaciones ultravioletas, mediante un aparato especial (simulador solar). Mientras que el fotoparche (PFP) se lo aplica en forma de parche (habitualmente en la espalda) para estudiar las  causas de reacciones alérgicas a la exposición solar.

Cuidados necesarios

A los pacientes que padecen de verdaderas alergias solares, Almeida sugiere no exponerse al sol, ya que aun dosis mínimas de radiación solar pueden desencadenar el cuadro. Sin embargo, en la mayoría de las reacciones fototóxicas es importante el uso   de protector solar medicado, unido a un protector solar oral, y evitar el sol entre las 10:00 y 16:00.

Incluso, las personas con dermatitis atópica no deben olvidar que la radiación calórica es la que les desencadena este problema, por ello deben evitar exponerse a esta los días muy soleados o cuando hace mucho calor. También hay que evitar la radiación solar proveniente de fuentes naturales y artificiales. (S.M.de.C)