Educación digital

20 de Noviembre de 2011
  • Los niños pequeños pueden descubrir la lectoescritura a través de los cuentos virtuales.
  • Estudiantes del Centro de Estudios Espíritu Santo en clase de computación aprendiendo el uso de software multimedia.
  • Alumnos de Logos Academy usan la pantalla digital para interactuar con las imágenes y sonidos que emiten trescientos cuentos en inglés.
Sheyla Mosquera de Calderón

En las aulas de clases de algunas instituciones educativas ya se emplean herramientas tecnológicas digitales. Su uso permite a los alumnos estimular el aprendizaje.

El mundo se ha digitalizado. Esto ha provocado que la educación básica también considere el uso de herramientas tecnológicas en las aulas de clase, sobre todo porque los niños desde que son pequeños han tenido la oportunidad de jugar por lo menos con un control remoto, celular, PC, laptop o iPad de sus padres.

La generación actual es muy visual y su forma de aprender y descubrir el mundo está ligada a la presión de un botón, de manera que al ingresar a una educación formal los alumnos están más interesados si utilizan los recursos que les atraen y les permiten descubrir por sí solos nuevas experiencias.

En algunas instituciones educativas de los Estados Unidos, México o Singapur, entre otros, los alumnos están utilizando el iPad como herramienta de trabajo. No solo porque reemplaza los textos en papel por versiones electrónicas e interactivas, sino porque mejoran la comunicación con los maestros, facilitan la entrega de asignaciones y mantienen un récord digital del trabajo del estudiante.

En Ecuador, aún en las aulas escolares no se emplean las iPad, pero sí existen en las salas de computación PC con pantalla plana o pizarras digitales interactivas para que los alumnos escuchen cuentos, aprendan lenguaje, matemáticas, ciencias, física e historia, entre otros, con software específicos. Incluso, en algunas escuelas o colegios a través de la internet o plataformas virtuales se mantienen comunicados con los maestros, padres de familia o alumnos.

Según Susana Salcedo de Egas, directora general de Logos Academy, desde hace cuatro años su institución visionó establecer una plataforma educativa virtual con orientación a la web 2.0 que convierte los procesos de aula en dinámicos. Incluso a fines de este año sacará un programa digital. Es un sistema de control de tutorías que por medio de un ordenador se puede supervisar que los maestros estén todo el tiempo trabajando con los alumnos y además se puede ver el rendimiento de estos por asignatura o de manera global.

Cuando los profesores reporten una novedad se activará una señal que llegará al padre de familia y a su vez al alumno de hasta el décimo año. Si el estudiante, por ejemplo, no entregó una tarea tendrá un tiempo límite para volverla a presentar y esto le hará un flash (alerta).

La plataforma virtual, menciona, tiene una serie de herramientas que son complemento del proceso curricular de enseñanza-aprendizaje del alumno. A través de una clave tendrá acceso a videos tutores que son clases grabadas que sirven de repaso especialmente una semana antes de los exámenes.

“En el 2012 se trabajará con 25 iPad en los laboratorios del preescolar. Pero lo más importante es que ya existen profesores que se están capacitando para organizar la enseñanza con esta herramienta. Esto los obliga a que hagan una doble planificación de su clase física y virtual”, asegura Egas.

Doble capacitación

Para Cristina Weisson de Ledergerber, máster en Nuevas Tecnologías Aplicadas a la Educación y subdirectora Pedagógica del Instituto Particular Abdón Calderón (IPAC), las herramientas digitales no son por sí solas fuentes del conocimiento y es el docente el que tiene que capacitarse para poder utilizarlas como un medio para desarrollar las diferentes destrezas y habilidades mentales como comparar, identificar, analizar, entre tantas otras, el pensamiento lógico y creativo.

Los niños de edades tempranas necesitan desarrollarse en forma integral, agrega, esto significa que deben seguir realizando actividades corporales de motricidad gruesa y fina. También estar expuestos a la experiencia y observación directa realizando actividades dentro y fuera del salón, participar en juegos grupales e individuales. Es fundamental, dice, que desarrollen todos sus sentidos por lo que el uso de la tecnología no va a ocupar toda la jornada diaria ni todo el periodo de clase.

En el IPAC, por ejemplo, se trabaja desde estimulación temprana en la adquisición de las destrezas visuales, auditivas y motrices que encaminan al niño en el uso de la tecnología por medio de juguetes y actividades de oprimir botones, distinguirlos o discriminar sonidos, entre otras.

Los alumnos de preescolar realizan actividades de acercamiento y uso de tecnología en el Aula Clic.com, que es un laboratorio de computación equipado para trabajar con niños de 2 a 5 años guiados por maestras especializadas. Estas los ayudan a reforzar las primeras nociones y les enseñan a identificar las diferentes partes del computador y el uso de botones a través de actividades lúdicas de reconocimiento de colores, formas, números, así como las primeras medidas de precaución con respecto a su aplicación.

A partir de 2º a 7º año de básica, agrega, el uso de tecnología en cada salón de clase es un recurso más que permite al maestro diseñar la clase de manera que el niño sea quien actúe y aprenda de forma interactiva haciendo ejercicios en pizarras digitales, con proyección de videos referentes al tema tratado, usando internet o con  material auditivo, entre otras. También trabajan con plataforma virtual.

Humanistas

Weisson de Ledergerber asegura que uso de la tecnología, no implica que sea el único recurso que se debe utilizar en educación, es simplemente uno más. Los niños deberán seguir utilizando todos los otros materiales que sirven para desarrollar diferentes habilidades.

“Si se usa la tecnología de forma adecuada en educación, no tenemos por qué dejar de ser humanistas. En realidad seguimos trabajando en la formación de seres humanos sensibles, que trabajen por su desarrollo personal y al mismo tiempo se preocupen del bien común y del medio ambiente, que luchen por que se vivan los valores y el respeto al otro, pero sin dejar de avanzar con los retos de la sociedad global a la que pertenecemos”, agrega.

Lo importante, dice, es que el docente comprenda que él no es dueño absoluto del conocimiento y debe olvidarse de dar clases magistrales tipo conferencia. El tiempo del dictado o la copia de la pizarra, en secundaria ya no va más, pues el acceso a la información está a la disposición de cada estudiante, el mismo que debe haber desarrollado las destrezas para trabajar con ella, extrayendo lo que le va a ser útil y poder convertirla en conocimiento.

Acelera el aprendizaje

Según Alexandra Cedeño Aspiazu, vicerrectora del Masculino Espíritu Santo, el uso de herramientas tecnológicas en las aulas escolares definitivamente acelera el proceso de aprendizaje porque favorecen el desarrollo de ciertas habilidades especialmente la percepción, la memoria, la capacidad de discriminación, la atención y el trabajo en grupo.

En todos los niveles de educación básica del Centro de Estudios Espíritu Santo, agrega, se utiliza en las clases la pizarra interactiva que permite la interactividad, el trabajo grupal aumentando la aptitud del niño para explorar, innovar y tomar decisiones en el desarrollo de sus tareas.

El licenciado Jesús Uriña Arana, director de Sistemas de esa misma institución, refiere que la tecnología  en general está ayudando a tener procesos de enseñanza aprendizaje más efectivos. La facilidad que los niños tienen para adaptarse a estos recursos hoy en día es sorprendente, refiere, por lo tanto, el maestro tiene un aliado para impartir conocimientos de manera más rápida y con excelentes resultados.

“Nosotros tenemos más de cinco años utilizando los recursos de computación para aplicar este sistema de enseñanza con los más pequeños del Jardín de Infantes Garabatos y cada año los dotamos de mejores recursos de hardware y de software, buscando siempre la excelencia para su formación integral”, asegura Uriña.

Mientras la tecnología se la use como herramienta, toda asignatura puede ser dada con recursos multimedia y digitales. Desde una clase de cocina, donde una infinidad de recetas se las puede leer usando una tableta digital, hasta una clase de física, que con la ayuda de simuladores pueda demostrar la aplicación de la fórmula de la fuerza o determinar la velocidad de un bólido. Todas pueden apoyarse en la tecnología para facilitar el traspaso del conocimiento del profesor al alumno.

Uriña refiere que la implementación de laboratorios de computación en el Centro de Estudios Espíritu Santo tiene más de quince años; el uso de recursos multimedia en salas exclusivas para audio y video más de diez años, y además aulas con proyectores de imágenes, computadoras y pizarras interactivas desde hace cinco años.

Cada programa, agrega, tiene un objetivo específico según la materia que lo utiliza. Los alumnos aprenden con herramientas que se utilizan en el mundo laboral, lo cual les permite crear habilidades y destrezas que ponen en práctica en casas abiertas organizadas para tal efecto y otros eventos como las ferias de microempresas donde exponen proyectos construidos sobre bases reales de un verdadero negocio.

Robótica y MP4

Para la doctora Carmen Naumann, directora de Secundaria del colegio Alemán Humboldt de Guayaquil, esta institución tiene más de quince años enseñando a través de la informática, como parte del currículo académico. Tiene varias salas de computación y robótica, donde el mundo virtual es recurrido para el aprendizaje.

“La enseñanza por medio de la tecnología digital forma parte de cualquier materia, pues los alumnos desde primaria trabajan con programas digitales para realizar trabajos en clases, de investigación, entre otros”.

El colegio también posee pantallas interactivas que funcionan como una extensión gigante del computador, cuyo cursor es una pluma digital. Por medio de esta pantalla se puede acceder al internet, ejecutar funciones, navegar en páginas,  descargar imágenes, subir imágenes y mucho más.

Se utiliza como herramienta de investigación para conocer sobre un tema, también como pizarra matemática donde el alumno puede ejecutar ecuaciones mientras dibuja los componentes de una figura alterándola las veces que desee. Hay muchas funcionalidades . Se puede escribir, borrar, agrandar, enlazar y muchas funciones de un sistema operativo común y corriente.

A parte de estas pizarras, dice  Naumann, se trabaja con equipos de reproducción digital de videos y música. Se les llama comúnmente MP4. Las áreas que más los utiliza son las de inglés y alemán. Los profesores graban el material de estudio en el MP4 y luego crean una clase donde los alumnos ven o escuchan el archivo digital y así se realizan las dinámicas de grupos.

Asimismo, agrega, los profesores descargan los llamados Pod Cast desde varias fuentes y los utilizan también como medio de enseñanza. La televisión alemana transmite sus noticieros por medio de estos Pod Cast que son luego discutidos en la hora de clases.
Los alumnos también tienen acceso a laptops para trabajar dentro de las clases. Usualmente, se utilizan para trabajos grupales de investigación,  entre otras.

“El tema de introducir iPad al sistema educativo está siendo reflexionado. Como institución debemos estar siempre a la par con la vanguardia y los avances tecnológicos, que pueden ser de gran utilidad sin son propiamente empleados”, asegura.

Una de las metas futuras del plantel, refiere Naumann, es tener una biblioteca digital y un sistema de ingreso a esta. “El iPad sería de gran utilidad para este proyecto, pero por el momento factores monetarios como de seguridad retrasan el uso de esta y quizás otras tecnologías”.

Estimula a los niños

Salcedo de Egas refiere que la tecnología digital es un estimulante, porque ayuda a los niños pequeños a sintonizarse con esos momentos de dispersión. Esta es un gran imán para que logren tener periodos de atención más largos. “Está comprobado que los niños entre más pequeños son tienen menores periodos de atención. En una clase de 40 minutos, ellos solo atienden 20 y para el resto de tiempo la maestra tiene que hacer magia para que presten atención”.

Definitivamente, agrega, la tecnología no va a reemplazar a aquellas habilidades innatas del ser humano y tampoco cree que el iPad va a reemplazar al libro físico, pero sí considera que las herramientas digitales han permitido poder accesar a una fuente alfa de información totalmente ilimitada.

“No hay que satanizar la tecnología, más bien hay que hacerse su aliada y usar todas las ventajas que tiene, pero siempre manteniendo un cuidado y pequeña distancia con aquello que pueda vulnerar el proceso de enseñanza”, asegura.

Hay muchos niños, dice, que dependiendo del grado de madurez y destrezas, estos aparatos digitales se convierten en dínamo generadores de respuestas múltiples. Incluso hay quienes descubren la lectoescritura a través de los cuentos virtuales.

Unas de las recomendaciones más importantes que los padres deben tener en cuenta, dice Carmen Naumann, es la necesidad de alfabetizarse informáticamente. “Es la responsabilidad de los mayores conducir a los niños y jóvenes a tener un criterio formado sobre las ventajas y desventajas de la tecnología digital y de cualquier otro sistema”.

Sin embargo, la médica Patricia Ordóñez, especialista en pedagogía Curativa en el Kinderzentrum, cree que la tecnología altera muchos aspectos del niño, sobre todo, las pantallas “desintegran” los sentidos, cuando lo que el niño necesita para el aprendizaje es que todos estos estén integrados. “Ellos pueden presentar problemas en la comunicación, falta de sociabilización e irritabilidad ocasionada por el exceso de estímulos visuales y auditivos que provocan estas pantallas”, asegura.

“La materia de computación debe implementarse a partir del sexto de básica (5º grado) cuando el cerebro del niño está listo para recibir este tipo de estímulos. Luego debe iniciarse la enseñanza de los programas básicos que el niño pueda entender”.

“Es la responsabilidad de los mayores conducir a los niños y jóvenes a tener un criterio formado sobre las ventajas y desventajas  de la tecnología digital y de cualquier otro sistema”.
Carmen Naumann, Colegio Alemán Humboldt

 

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