Evangelizando en contra de la ignorancia

24 de Septiembre de 2017
Texto y foto: Mauricio torres | mt@mauricio-torres.com

Paola pasea por el centro en un día de solazo infernal. Aprovecha la sombra de uno de los pocos parques de la ciudad que tienen árboles de verdad. Ahí, hace una pausa de su llamada telefónica (ver foto) y me cuenta lo que es tener dreads en Guayaquil.

Paola Santamaría, no quiero decir mi edad, año sabático

¿Qué onda con tu facha?

Nada, si hace calor usas vestido para no tener calor.

Pero ese vestido está chévere. ¿Te gustan las flores?

No mucho, pero este vestido me gusta porque es como de niña.

Pareces más bien sacada de una película japonesa o coreana.

O como Merlina.

Cuéntame de tus dreads. ¿Cuánto tiempo llevas ya con ellas?

Ehhhhh... cuatro años y medio.

¿Qué te motivó a hacer esto?

Un día se me cruzó por la cabeza que quería tener dreads y me comencé a dejar crecer el pelo porque no quería hacérmelo con el pelo corto.

Se te cruzó hace casi cinco años y aún lo tienes todo cruzado.

Sí, ya me estoy cansando un poco. Me pesan cuando estoy en el agua surfeando, entonces quisiera cortarlo. Pero no estoy segura. Si las corto, no hay vuelta atrás.

¿Qué te dicen cuando te ven?

Hay de todo. Hay gente que dice que son increíbles, que qué chévere. También hay gente que no me dice nada, pero me miran con asco. Me preguntan si me baño.

¿Y sí te bañas?

No sé qué tiene que ver mis dreads con bañarme. Quizás la pregunta adecuada sería “¿te lavas la cabeza?”. Y sí, claro que me lavo la cabeza. El jabón que traigo es un jabón de coco con la menor cantidad de químicos y hace que el pelo esté más áspero y más seco, lo cual hace que sea más fácil que se enrede.

Ya sé que estás de sabático, ¿pero en el ambiente laboral no te hacen problemas por tus dreads?

Trabajé en una multinacional y nunca tuve problemas. Trabajé un año con mi pelo normal, y al irme de vacaciones me hice los dreads. Al regresar me decían: “Wow, lo máximo. Nunca hubo un “qué asco”. Eso lo siento más en la calle.

¿Qué le dirías a alguien que se quiere hacer dreads?

Bueno, que probablemente le preguntarán estupideces en la calle.

Así como yo ahora.

Sí, bueno ehhh... no no. No están tan estúpidas tus preguntas.

TAN.

Pero sí, hay mucho prejuicio. Pero no solo aquí. En Argentina me preguntaban si tenía “papel para fumar”. Y yo no uso drogas.

El día que te quites los dreads, me avisas y te entrevisto.

En realidad, seré calva.

¿Te vas a pelar a mate?

Sí. Acá en el Ecuador las mujeres tienen mucho rollo con el pelo, como símbolo de feminidad y belleza; si tienes el pelo corto o diferente, eres fea o rara.

PD: Los dreads en clima caliente son superfrescos. Tip de belleza y práctico de este domingo.

¿Le gusta esta facha? Coméntenos

  Deja tu comentario