Puede mejorar: Carnes argentinas
“Luciano pretende ofrecer una cocina fusión en la que se hagan presentes Argentina y Ecuador... Carlitos podría alcanzar pronto un buen éxito. Es un lugar ideal para toda la familia”.
Porque deseaba tranquilidad escogí visitar este nuevo lugar un día lunes a las 12:00. El gerente Luciano La Spina me recibió, pude cosechar los primeros datos.
En realidad el sitio no es nuevo sino que cambió de nombre y de propietario. Anteriormente lo conocimos como El Fogón, restaurante que tuvo su época de auge, pero declinó sin que sepamos las razones reales.
Recibí hace varios meses quejas de clientes por mala atención o presencia de insectos indeseables en aquel desaparecido sitio. Luciano acota que una fumigación seria, integral, fue una de sus primeras decisiones; él es argentino, nació en Buenos Aires, está muy al tanto de los cortes, ama su trabajo y manifiesta la mejor buena voluntad.
Carlitos Parrilla Bar se beneficia con un local bien puesto, decoración gaucha algo rústica, un bar bien ubicado, ambiente muy luminoso mediante amplios ventanales que permiten una vista agradable. Se integró a la decoración una gran cantidad de botellas, asoma cierto recuerdo de Carlos Gardel.
Luciano pretende ofrecer una cocina fusión en la que se hagan presentes Argentina y Ecuador, sus parrilladas son abundantes y variadas. Podrán escoger los más diversos cortes, el matambre de cerdo, costillas de cerda, milanesas, bifes, parrilladas de mariscos, salchichas, morcilla, mollejas, ubre, riñones, risottos, arroz moro. Acompañarán con papas fritas o al horno, ensaladas o arroz.
Estando solamente dos clientes en aquel horario tempranero tuvimos, sin embargo, que esperar demasiado tiempo una cerveza que llegó a los diez minutos. Los camareros deben siempre preguntar si deseamos agua (con o sin gas). El servicio, sin embargo, es correcto, el personal amable. El ambiente musical adecuado y discreto permite las conversaciones. Los fines de semana hay música en vivo.
El bife de chorizo nacional ($ 22,53) es una costeleta mediana sin huesos y sin mayores vetas de grasa en su interior. El filo grueso de grasa exterior puede ser muy sabrosa, lo que no conseguimos aún en la carne nacional (al menos no la encontré hasta la fecha). El bife angosto ($ 20,09) es un corte ubicado en la parte del churrasco largo, pero deshuesado gusta mucho por estar sin mucha grasa ni nervios. Carlitos me habla de la carne uruguaya, pero sabemos que las nuevas leyes impedirán pronto la importación de carne, lo que constituirá un grave problema para los lugares selectos de parrillada.
El chef deberá respetar el grado de cocción deseado por los clientes. Pedí un bife de chorizo cocido 1/4, es decir, muy poco, me lo trajeron pasado de medio punto, los riñones llegaron recocidos, yesosos, nada jugosos, cuando manifesté varias veces tanto al camarero como al gerente, que los deseaba rosaditos y poco asados.
Las mollejas estuvieron demasiado grasosas cuando deben alcanzar una extrema delicadeza en su sabor para poder realmente ser apreciadas. No hay todavía una carta de vinos, me pidieron escoger entre un Montes Alfa clásico, un Trapiche roble y un Caliterra. Opté por el Montes siempre afrutado, color rubí, buena permanencia en boca.
Como postre tienen un excelente y recomendable flan de dulce con caramelo ($ 3,65). El café puede ser un buen expreso. Como conclusión: corrigiendo ciertas fallas que acabo de exponer, Carlitos podría alcanzar pronto un buen éxito. Es un lugar ideal para toda la familia. Atiende todos los días desde las 11:00, los fines de semana desde las 13:00. Existe cierta facilidad para el estacionamiento.
Mi pregunta para que me envíen sus respuestas. ¿Cuál, según ustedes es el mejor lugar para las parrilladas? Podrían surgir sorpresas.