Una novela inquietante

Por Clara Medina
01 de Julio de 2012

Una mezcla de cuento de hadas transgresor y de novela Lolita. Así podría definirse el libro Una hermosa doncella, de la escritora estounidense Joyce Carol Oates, que editó el sello Alfaguara y que presenta una inquietante historia entre un hombre mayor, millonario, que es escritor, pintor y compositor, y una joven de 16 años, que cuida niños.

El encuentro de estos dos personajes tan dispares se produce en un balneario exclusivo. Kidder es uno de los hombres más acaudalados y respetados del lugar. Katya es una chica que para sobrevivir trabaja de niñera. Cuida a los hijos de un matrimonio que busca ascender en la escala social.

Un día, mientras Katya pasea a los niños, conoce a este hombre y a partir de allí surgirá entre ellos una extraña relación. Él admira de ella quizá su juventud y su belleza discreta. También su sencillez.

Ella, su porte distinguido. Quizá su dinero, aunque la suya no es ambición, sino deslumbramiento por un ser tan elegante. Nunca había conocido a alguien así. Los hombres del pueblo de donde ella proviene son hoscos o borrachos. Incluso los de su propia familia.

Poco a poco establecen un nexo, que se llena de rituales, de encuentros furtivos y de acontecimientos nada esperados, que hacen que disloquen al lector. La novela toma rumbos insospechados. Y eso hace de esta obra una gran experiencia lectora.

No es una historia de amor propiamente, aunque haya algo de ello. Tampoco es de odio y venganzas, aunque se presenten ciertos atisbos. Es una novela sobre la vida, sobre el paso del tiempo. Sobre la finitud de los seres humanos y sobre la inexorable derrota del cuerpo.

En esta historia se contraponen juventud y vejez, enfermedad y salud, dinero y pobreza, afectos y desafectos.

¿Qué hace que dos personas tan opuestas de alguna forma se complementen? ¿Los seres humanos nos juntamos a otros porque encontramos en ellos afinidades o porque hallamos algo o mucho de lo que carecemos? ¿Puede establecerse una relación entre personas de edades tan dispares, de vivencias y experiencias tan ajenas?

Una hermosa doncella deja en el lector incertidumbres, porque no es una historia cómoda ni complaciente, ni políticamente correcta. Pero allí está su mérito. Y se disfruta. Y atrapa desde las primeras páginas.

claramedina5@gmail.com

  Deja tu comentario