La ciudad de Jünger

Por Hernán Pérez Loose
01 de Abril de 2012

“Para mí la dicha representa los rasgos de lo intacto, de lo nunca tocado ni descrito. (…) ‘La felicidad se asienta en la ilusión’, prosiguió el pintor ‘y su realización es su muerte’  ¿Qué es lo que nos hace titubear entre el momento en que vemos brillar el fruto en el follaje y aquel en el que la mano lo arranca? Querríamos prolongar el tenso instante de la felicidad”. Así discurre Lucius,  uno de los personajes de la novela Heliópolis (Seix Barral. Barcelona) del escritor alemán Ernst Jünger.

Heliópolis es una ciudad lejana que está como suspendida en el futuro, en un futuro dominado por la técnica de manera abrumadora. La ciudad es también el escenario de pasiones humanas donde podemos ver partes de nuestros fragmentos humanos. Atraviesa una conmoción interna por un conflicto de poder que se está cuajando en el vértice de su gobierno.

Algunas tradiciones y un sentido comunitario vienen siendo violentados por las armas sofisticadas de un ejército que incluye tecnologías que le permiten almacenar todos los secretos de sus habitantes.

El comandante Lucius, protagonista de la obra, se debate en una utopía dolorosa, entre el culto a los rigores de la disciplina y la seducción de una mujer, Balfur.

El título de la novela en griego significa ‘La ciudad del sol’, en clara alusión a la obra de Tomás Campanella, el dominico perseguido, y seguidor, a su vez, de Platón, Petrarca y San Agustín,  autor de otra utopía, La cittá dell sole.

Heliópolis fue la primera novela que Jünger escribe luego de terminada la Segunda Guerra Mundial. Está impregnada de un cierto pesimismo hacia la tecnología y la ciencia, siguiendo en esto una tradición alemana que se extiende desde Max Weber, Nietzsche hasta el propio Heidegger.

La obra está llena de diálogos fascinantes y reflexiones profundas de carácter filosófico sin caer en la aridez o pedantería.

Es probable que hoy en día las dudas y profecías de Jünger sobre la ciencia y la tecnología parezcan algo distantes –probablemente los males de la nueva utopía vienen de otros lados– pero no dejan de ser un referente necesario para comprender los conflictos que dominaron el siglo XX.

En todo caso, un reciente libro que recoge las ponencias en un seminario que tuvo lugar en España: Ernst Jünger y los pronósticos del tercer milenio (Complutense, Madrid. 2006) da muestra de la vitalidad de su pensamiento.

Otra de sus grandes obras es la novela Los acantilados de mármol cuya lectura también recomendamos. Junto a su larga lista de libros y años de vida (104 años), Jünger tuvo una existencia llena de episodios motivadores, desde su participación en un complot para asesinar a Hitler hasta sus experimentos con LSD durante los años sesenta.

hernanperezloose@gmail.com

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