Indestructible

24 de Julio de 2016

Una mujer violada, pero que aparentemente no reacciona ante el hecho, es la historia de Elle, filme protagonizado por la francesa Isabelle Huppert.

Cuando se proyectó Elle en el último día del Festival de Cine de Cannes, pocos quedaron defraudados. El filme, de Paul Verhoeven, que cuenta la historia de una mujer violada, se perfilaba con un aire a escándalo. Todos querían ver lo nuevo del autor de Instinto básico (1996) o Delicias turcas (1973) a partir de esa premisa.

Elle pone de manifiesto a Michèle, una directora de una compañía de videojuegos, divorciada, manteniendo una relación esporádica con el mejor amigo de su exmarido, mientras que la novia de su hijo está embarazada de otro hombre. Su vida cambia para siempre cuando es atacada en su casa por un asaltante, lo que la llevará a intentar descubrir su identidad.

La actriz

Adolescente virgen que busca convertirse en mujer (Los rompepelotas, 1974), prostituta sifilosa (Prostituta de día, señorita de noche, 1978), hija incestuosa (Historia de Piera, 1983), profesora de piano sadomasoquista (La pianista, 2001), monja lesbiana (La religiosa, 2013) son algunos de los papeles que ha interpretado Isabelle Huppert (1953).

Los asistentes a la última edición del Festival de Cannes estaban también pendientes por el hecho de que la protagonista sea la actriz francesa, profesional atrevida, descomplicada por aceptar papeles que otra intérprete de su estatus repudiaría.

En Cannes: Isabelle Huppert y el cineasta holandés Paul Verhoeven.

En Elle es una mujer que, a pesar de la violencia que sufre, rechaza sentirse mártir. “Ella no se comporta nunca como una víctima, a pesar de que tiene motivos más que suficientes para hacerlo. El sentimiento de culpabilidad, la obligación de soportar todo lo que le pase... Resulta difícil desembarazar de todas esas cosas a los personajes femeninos. Siempre existe esa tentación en el cine, dirigirse hacia la emoción (¡falsa, a fin de cuentas!), hacia un sentimentalismo un poco edulcorado”, se refirió Huppert.

Ojalá no se malinterprete la actitud de Michèle, aclaró Huppert. “No debe tomarse como una historia realista, no es una declaración general sobre una mujer que es violada y que acepta esa violación. La gran cualidad es que no hay explicaciones, sino que el público se crea sus propias hipótesis. Mi personaje reacciona o no a lo que pasa, no hay más”.

“Vale aclarar que Michèle es la hija de un asesino y su carácter y reacciones son el resultado de todo lo que ha pasado”, dijo la actriz. (A.C.J.) (E)

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