Estados Unidos: de costa a costa

28 de Octubre de 2012

Las carreteras estadounidenses motivan un viaje fantástico de aproximadamente 7.000 kilómetros que atrapan los anhelos de los aventureros.

El turista común prefiere alquilar un automóvil para cumplir esta ruta que regularmente toma entre 15 y 20 días para sumergir sus sueños en las aguas de dos océanos: el Atlántico y el Pacífico. Y todo lo que hay en medio.

El tour de costa a costa por Estados Unidos luce largo y agotador, aunque la recompensa se reclama día a día al posar los ojos frente a paisajes sembrados por praderas, bosques, montañas y desiertos, además de ciudades emblemáticas. ¿La ruta? No está definida. Suele empezar en Nueva York y terminar en Los Ángeles o San Francisco. O viceversa.

Aquí les presentamos una opción a través de la Red de Autopistas Interestatales de Estados Unidos.

Nueva York. El punto de salida perfecto. Visitas obligadas: Central Park, el puente de Brooklyn, Lincoln Center, la Quinta Avenida, la Estatua de la Libertad y el nuevo World Trade Center. Es la ciudad adecuada para poner a prueba el espíritu de este viaje: no dedicarle mucho tiempo a cada ciudad. Pero antes de iniciar vale ocupar uno o dos días para conocer las cataratas del Niágara, ubicadas a unas seis horas por carretera.

Washington D.C. La capital del país. Está a 370 kilómetros al sur de Nueva York. Hay un montón de visitas gratuitas, como el Capitolio, la Casa Blanca, la Corte Suprema, los monumentos a Washington, a Lincoln, a Jefferson y a Roosevelt. También hay que visitar el Cementerio Nacional de Arlington, los monumentos a los soldados caídos durante las guerras de Vietnam y de Corea, y el Instituto Smithoniano.

Cleveland. En esta urbe de Ohio se inventó el término rock and roll. El sitio exacto está marcado por una placa muy cerca del lago y del Rock and Roll Hall of Fame and Museum, un megamuseo que celebra este género genuinamente estadounidense. Cleveland es una ciudad de grandes parques verdes, animados barrios y edificios históricos que se asienta en la desembocadura del río Cuyahoga.

Amish Country. Esta pacífica comunidad de Ohio (hay más pueblos amish en otros estados) es conocida por su sencilla vestimenta y por prescindir de las comodidades modernas, como la electricidad y los automóviles. También son famosos por sus refinadas labores de costura, muebles hechos a mano y gastronomía.

Chicago. Su estética de urbe ultramoderna impresiona y encanta en el estado de Illinois. Se recomienda el paseo fluvial por el río Chicago, que parte desde el famoso Navy Pier, y sus barrios étnicos, como Chinatown, Little Italy, Greektown y Brownsville. Un tour muy interesante revive los días de la ley seca, en las décadas de los 20 y los 30, a través de sitios famosos por haber sido frecuentados por criminales como Al Capone y John Dillinger.

Praderas del medio oeste La ruta atraviesa estas áreas campesinas consideradas el granero del país, debido a su producción agrícola, especialmente maíz y soya. Estas praderas cubren los estados de Iowa, Indiana, Illinois y Ohio, además de partes de los estados de Dakota del Sur, Dakota del Norte, Nebraska, Kansas y Minnesota. Los habitantes más juguetones de la zona son los divertidos perros de la pradera.

Monte Rushmore. Casi 2 millones de toneladas de roca tuvieron que ser removidas para esculpir las caras de los cuatro presidentes estadounidenses: George Washington, Thomas Jefferson, Theodore Roosevelt y Abraham Lincoln. Las obras duraron catorce años; finalizaron en 1941 en este escenario agreste del estado de Dakota del Sur. El tipo de roca es tan resistente que se erosiona solamente una capa de 2,5 centímetros cada 10.000 años.

Gran Cañón. Es una de las maravillas naturales que todo visitante debería conocer. Es una impresionante escarpada garganta excavada por el río Colorado en el norte del estado de Arizona. El Cañón está situado en su mayor parte dentro del  Parque Nacional del Gran Cañón (uno de los primeros  parques naturales de los Estados Unidos). El presidente Theodore Roosevelt  fue el mayor promotor de esta área natural.

Denver. Esta moderna ciudad es el punto de partida hacia los numerosos complejos de esquí del estado de Colorado, ya que está rodeada por las montañas Rocosas. Denver es famoso por su Capitolio (similar al del Washington), sus estadios y su industria cervecera. Una bonita visita lleva al Tiny Town, un pueblo en miniatura con edificios a un sexto del tamaño original.

Las Vegas. Es la capital mundial del entretenimiento. La vida nocturna se enciende al recorrer la avenida principal (The Strip) de esta ciudad levantada en pleno desierto de Nevada, dejándose sorprender por el neón de innumerables letreros que anuncian la presencia de casinos y de los hoteles más suntuosos.

San Francisco. Punto final del recorrido, en el estado de California. El Barrio Chino es mundialmente conocido, además de los paseos en el tradicional tranvía. El Pier 39 (Muelle 39) es un recinto comercial al aire libre que cuenta con famosos restaurantes de mariscos, tiendas y un centro de cuidado de mamíferos marinos. El muelle se ubica al borde del distrito de  Fisherman’s Wharf. Desde el muelle se puede ver  Alcatraz y el  puente Golden Gate. (M.P.)

Fuentes: vuelaviajes.com, .rumbo66.es, discoverohio.com, encabezeta.blogspot.com, viamedius.com, viajes.net, usatourist.com

  Deja tu comentario