A conquistar Cojitambo

02 de Febrero de 2014
  • El complejo arqueológico Cojitambo exhibe los restos de una edificación cañari y, posteriormente, inca asentada en este sitio sagrado.
  • El cerro Cojitambo permite escaladas para novatos, intermedios y expertos.

¡Agárrense! Esta parroquia del cantón Azogues (Cañar) brinda mucha aventura y arqueología.

Pensar en la provincia del Cañar generalmente significa visualizar la gran migración de compatriotas que salieron del país para buscar mejores oportunidades de trabajo en el extranjero.

Por ello las vías que conectan los diversos poblados de este territorio suelen exhibir grandes viviendas de cemento con amplios ventanales que rompen con la arquitectura de las tradicionales casas de paja, adobe y bahareque (armazón de madera) que aún sobreviven para brindar cobijo a sus pobladores.

Por eso, resulta justo redescubrir esta provincia austral –convenientemente cerca de Guayaquil y de Cuenca– para exhibir su potencial arqueológico y natural, el cual encontramos de manera especialmente intensa en la parroquia Cojitambo, ubicada a 11 kilómetros al oeste de la ciudad de Azogues, en la vía a Déleg, y a 25 kilómetros de la capital azuaya.

Nuevas rutas

El cerro Cojitambo es el gran atractivo natural de la zona, el cual es considerado de tanto valor como destino que en noviembre anterior el Ministerio de Turismo inauguró setenta rutas de escalada en las paredes de la montaña, sumando un total de 164 vías adecuadas para realizar esta actividad extrema.

Las vías verticales implementadas ofrecen diferente complejidad para satisfacer a escaladores principiantes (cara oeste del cerro), intermedios y expertos (cara este).

Xavier Montezuma, experto de la tienda de equipos de montaña Monodedo, la cual desarrolló las rutas para el Ministerio, explica que en el cerro han recibido familias con niños y adultos mayores, “y la gran mayoría ha logrado ascender en la montaña”, que tiene una altura de 3.076 metros.

Las dos zonas para los principiantes, quienes no necesitan ninguna experiencia, se llaman Revolcón y VIP, cada una con 10 rutas limpias de rocas sueltas (para evitar deslizamientos) y ganchos instalados para las cuerdas.

Cada excursionista novato se encontrará con paredes de entre 15 y 30 metros de alto, las cuales pueden permitirle en total entre 150 y 250 metros de escalada, pero en cada tramo hay que bajar a la base, elevada a unos 2.900 metros, para tomar la siguiente ruta vertical.

Ruinas cañaris e incas

En esta zona también se encuentra el complejo arqueológico Cojitambo, que se levanta sobre la cumbre tipo meseta (plana) y los lados norte y oeste del homónimo cerro. El conjunto se piensa fue habitado en los períodos: Desarrollo Regional (500 a. C. - 500 d. C.), Integración (500 - 1460 d. C.) y de permanencia inca (1460 -1532 d. C.).

El complejo arquitectónico, formado por bloques de roca de cantera unidos en hileras gracias a una mezcla de roca negra, se articula con un tramo del camino del Inca que pasa por la base del cerro, así que en la época aborigen tal estructura se comunicaba con la antigua Tomebamba.

Por ello, Cojitambo también funcionaba como refugio de descanso para nuestros ancestros. Aunque hoy se asoma como sitio de contemplación y adrenalina.

Para viajar desde Cuenca: En transporte privado tomar la autopista hacia Azogues, pasar la capital de Cañar hasta el desvío hacia Cojitambo. O desde el terminal terrestre de Cuenca tomar un bus hasta Azogues, y luego otro hacia Cojitambo.

Contactos: Operadoras Expediciones Apullacta (07) 283-7815, Terra Diversa (07) 282-3782, Eco Trek (07) 409-0060. Día completo: Desde $ 65 (incluye transporte, guianza, equipos, box lunch e impuestos).

Asesoría: Tienda de equipos de montaña Monodedo, sucursal Cuenca, (07) 288-5909, monodedo.com. Fuente de apoyo: viajandox.com.

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