Aventuras marinas: Memorias de un ‘lobo’

Por Paula Tagle
14 de Septiembre de 2014

“Con gran sentido del humor y sensibilidad, el capitán Neira describe las serenatas bajo los balcones de las jóvenes guayaquileñas de padres celosos, los primeros amores, los puertos donde siempre una mujer espera”.

Cuando llegué a Galápagos tuve la suerte de encontrar gente que se convertiría en una especie de familia adoptiva. Entre ellos cuento al capitán Eduardo Neira, que no solo fungía de jefe máximo del barco Isabela II, sino que era también un amigo, un consejero, líder explorador, y por qué no, el maestro de ceremonias de nuestras farras, llenándonos de música con su guitarra y como director de la pequeña banda de a bordo, “los buchipluma”.

El 28 de agosto del 2014 el capitán, ‘mi capitán’, publicó su libro Antes de ti... en la mar; leerlo es como tener al mismo Eduardo relatando sus aventuras de marino mercante, sus anécdotas, sus sueños. Se trata de una novela de ficción, sin embargo, muy inspirada en su propia vida, y en el océano. Por eso siento al libro tan cercano porque, a pesar de que el personaje, Alberto, pertenece a otra generación y a distinto género, su vida es un poco la de todos los que hemos dedicado gran parte de nuestros días a navegar.

Alberto es guayaquileño de nacimiento y corazón. De niño veranea en Playas, donde construye balandras. La familia tiene una hacienda junto al río Chilintomo, donde, vaya casualidad, también mi familia tenía una hacienda. Él es curioso, aventurero, y de cada experiencia obtiene un aprendizaje, y siempre una alegría.

Con gran sentido del humor y sensibilidad, el capitán Neira describe las serenatas bajo los balcones de las jóvenes guayaquileñas de padres celosos, los primeros amores, los puertos donde siempre “una mujer espera”. Narra la soledad en la que viven estos hombres que navegan por meses lejos de su tierra, de sus familias.

Me hizo llorar con la carta que el personaje le escribiera a su novia eslava, dejándole al partir un corazón de piedritas en el muelle, o con su dulce sentimiento de solidaridad por Ximena, una joven prostituta salvadoreña de tristes ojos negros. Alberto describe sus aventuras en Europa, cuna de nuestra cultura; recorriendo museos y capillas, nos recuenta la historia de occidente. Pero también viaja al Asia, donde nos sumerge en las tradiciones y religiones de Tailandia, de la India. Navegamos por Japón, Filipinas; nos sumergimos en las tristezas y frustraciones de los inmigrantes encarcelados en plena frontera entre Estados Unidos y México. Y claro, también nos transporta al Galápagos de dos décadas atrás, en los tiempos en que la tripulación bajaba a cazar chivos, o en que se podían explorar los cerros y mares con mayor libertad. Alberto acampa en el volcán Alcedo, presencia la erupción de Cerro Azul desde su cima, y tiene aventuras hilarantes con tortugas gigantes (una de ellas confunde su camiseta verde con comida).

No se puede parar de leer. Este es un libro de navegantes, de amor de marineros, que, como dijera Neruda “besan y se van..., amor que puede ser eterno y puede ser fugaz, amor que quiere libertarse para volver a amar”.

Y más que gente de mar, somos humanos, sensibles, con un bagaje de memorias de infancias alegres o tristes, aprendiendo al andar. Así como Alberto, todos tenemos nuestro baúl de recuerdos, real o imaginario, con los viejos amores, los grandes y entrañables amigos, los dragones queridos, los juegos de infancia, los cuentos familiares, el cariño de los padres.

Antes de ti... en la mar (disponible en Mr. Book) es en definitiva un libro dulce, humano, ilustrativo y romántico. Y aspiro a que sea una primera entrega de varias novelas por venir.

nalutagle@yahoo.com

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