Invitaciones

Por Mariquita Noboa
22 de Marzo de 2015

Recibir una invitación es una deferencia. Recibir en casa a diez o veinte amigos, a cincuenta en un restaurante o a quinientos en el club, impone el mismo nivel de cuidado y prolijidad; la diferencia, entre otras cosas, radica en el tipo de evento al que se está invitando.

Luego de pasar por el riguroso filtro de la lista de invitados se debe definir el contenido y diseño de la misma. Las variaciones son múltiples si consideramos que:

• Las invitaciones para fiestas infantiles, igual que las de adolescentes, pueden tener su toque característico, ser coloridas, temáticas y contar con el sello de quien invita. No es necesario que sean impresas. Independientemente de que sea una reunión de pocos invitados, o mayoritaria, esta debe hacerse con no menos de diez días de anticipación.

• Quien recibe la invitación está obligado a agradecer y confirmar la asistencia, o simplemente excusarse, por el motivo que fuere.

• En el caso de las fiestas infantiles, el invitado es el niño, no la niñera, ni la enfermera, ni la nana de la abuelita.

• Las invitaciones que se enmarcan en el orden formal requieren otro tipo de presentación y tamaño. A diferencia de las anteriores, estas sí deben ser impresas. Toda invitación formal, como las de bautizo, confirmación y primera comunión, debe ser impresa en cartulina de calidad pero no hay necesidad de que vayan lacradas ni que tengan monograma.

• Cuando se trata de un matrimonio las consideraciones son otras: tamaño, diseño, contenido y tipografía. No es procedente enviar partes o invitaciones matrimoniales escritos en computadora, lo ideal es recurrir a un calígrafo. Tampoco deben de ir en dos sobres.

• Las invitaciones corporativas e institucionales también están en el orden de lo formal, por lo tanto, deben de ser impresas. Aniversarios, agasajos, reconocimientos o jubilaciones, responden a la política de cada empresa y el protocolo para determinar hora y lugar puede variar, según los cánones de cada entidad.

• Cuando se trata de desayunos de trabajo, almuerzos, cocteles o cenas, se debe de especificar, además de la fecha, hora y lugar, el motivo, hora de inicio y de finalización.

• Si la invitación se realiza en un lugar poco conocido, es válido adjuntar un croquis. Igual, se aprecia mucho saber si se cuenta con el servicio de vallet parking.

• En una invitación a un acto solemne no se debe señalar el tipo de vestimenta, el rigor está implícito. (O)

mtnoboa@hotmail.com

  Deja tu comentario