Exposición de pesebres
¿Se imagina un nacimiento artísticamente ubicado en la mitad de una cáscara de nuez? No, no se trata de una exhibición de miniaturas, son los ciento cincuenta y cinco pesebres, de todo tamaño, que pertenecieron a la colección del padre Hugo Vázquez y Almazán, que gracias a la generosa acción de su familia, ahora pertenecen a la Dirección de Cultura y Promoción Cívica de la Municipalidad de Guayaquil.
Si usted va por el centro de la ciudad, está cordialmente invitado a visitar el hall de ingreso de la Biblioteca Municipal para deleitarse y admirar la más diversa exposición de pesebres, nacimientos o Belén, como se lo conoce en España.
Los hay de Lladró, madera, plástico, cerámica, mármol, resina, acrílico, plata y hasta con baño de oro. Provienen de diferentes lugares: México, Perú, El Salvador, Estados Unidos, Bolivia, Brasil y Haití, representado por un conjunto de piezas esculpidas en madera de ébano.
También están los frailes cantores, con su característica sotana franciscana, y aunque no cantan, porque son figuras inertes, parecen arrullar el recinto que recibe visitas a toda hora.
Es una magnífica oportunidad para abordar temas de diversa índole, pero:
No trate de convencer a nadie de sus creencias o fe. El tópico religioso no es tema de conversación.
Aquí, como en todo lugar de esta índole, no se permite el ingreso de ninguna comida ni bebida.
En algunos museos o exhibiciones está prohibido tomar fotos con flash. Este no es el caso, lo puede hacer.
Si hace la visita con niños menores es una magnífica oportunidad para analizar etnias, costumbres, materiales, texturas y colores, establecer un buen nivel de apreciación, pero adviértales que no se debe correr.
Recuérdeles que decir gracias es muestra de cortesía.
En los museos, galerías de arte y bibliotecas hay normas establecidas y se las debe hacer cumplir.
Vaya, el ingreso es libre; tiene tiempo de continuar con la festividad que reúne a las varias generaciones de la familia. A diferencia del Papá Noel, Santa Claus, San Nicolás o el Viejito Pascuero, el nacimiento no responde a intereses mercadotecnistas ni es moda ni tendencia. La visita puede derivar en una interesante conversación, nunca en discusión. ¡Feliz Navidad! (O)