Maia Bergman: El trabajo de diseñar una marca de moda

13 de Noviembre de 2016
Ana María Maya, desde Londres

La diseñadora argentina se impone en en la moda londinense, gracias a su experiencia en importantes casas, como Dior y Nina Ricci.

Después de un mes de algarabía en la moda, donde las presentaciones de tendencias alrededor del mundo pararon, hubo tiempo de sentarnos a tomar un café con Maia Bergman. Hace un par de semanas regresó de Buenos Aires, luego de haber mostrado su última colección, y ahora desde su hogar (Londres) nos concedió una entrevista en la que pudimos charlar con ella sobre cómo ha sido construir una marca de diseño desde el Viejo Continente para el mundo.

A los 19 años Maia Bergman, de Buenos Aires, decidió salir de su zona de confort y probarse a sí misma el desafío de empezar una carrera en moda. Tenía en la mira a Nueva York o Londres, y se inclinó por esta última para estudiar y luego probar suerte en una industria supercompetitiva.

“Fue duro el cambio de país, pero a la vez muy divertido. Cuando vas a utn lugar donde no tienes ningún tipo de prejuicio (incluso sobre uno mismo) es bastante liberador”. Estudió en la Universidad Central Saint Martins, reconocida como una de las mejores del mundo en diseño, y donde tuvo la oportunidad de practicar en el aula desde el primer momento. “La carrera es superintensa y no te da tiempo para hacer nada por fuera, así que una vez graduada enseguida empecé a trabajar por mi cuenta”.

Nos cuenta Bergman que en Londres la industria del diseño funciona de forma bastante moderna. Quienes tienen talento y se las han ingeniado para armar un portafolio online, tienen la oportunidad de ser vistos por grandes marcas que están en constante búsqueda de colaboradores. Es así como se puede ser convocado para un proyecto y figurar en la creación de una colección para una firma de renombre.

Maia Bergman en su haber tiene colaboraciones con Topshop, Nina Ricci y Dior. Esta última, quizás la más llamativa en su carrera, se dio gracias a su estilo a la hora de diseñar. “La mayoría de las marcas trabajan con diseñadores freelance. Mi paso por Dior fue algo inesperado. Se me eligió para elaborar unos textiles en una temporada…. Ellos me contactaron porque vieron mi trabajo online. Mi interés siempre fue el embellishment (bordados y aplicación de piedras para decorar) y al parecer estaban buscando a alguien con un perfil que se asemejaba al mío, y así fue como se dio”.

En su relato pareciera que haber llegado adonde llegó fuera tarea fácil. Sin embargo, algunos de los datos que aportó en la entrevista llevan a pensar que en su caso no solo se especializó en diseño de moda, sino en el diseño de su propia carrera. Hace casi dos años empezó a meterse de lleno a la creación de su marca. Es de espíritu autodidacta y emprendedor, dos cualidades muy útiles en una industria y mercado competitivo como lo es en Londres.

El proceso para crear su primera colección fue de ocho meses, y tiene claro que aunque en un calendario regular es demasiado tiempo para una marca, también sabe que quiere generar a su propio ritmo y en términos modernos. “No soy de desfiles, y de hecho nunca voy a uno. Creo que esa inversión (de dinero) se puede hacer en otros recursos para promocionar una marca…. Las cosas funcionan distinto según el lugar donde quieras presentar una colección. En Europa están los retailers donde puedes comercializar tus productos, pero en Sudamérica aún está el concepto de tener una tienda propia. Vender online también es una opción pero depende del mercado”.

En sus planes está crear colecciones que puedan adaptarse a las exigencias de un mercado europeo y latino a la vez. Por un lado sueña con presentar sus diseños en diversos puntos alrededor del mundo y por el otro anhela ir asentándose nuevamente en Argentina. Todo dependerá de lo que surja en el día a día,
nos indica. (I)

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