Neruda, ahora
Mañana se cumplirán 40 años de la muerte de Pablo Neruda. Y su voz y sus versos permanecen. Libros, películas, obras de teatro, novelas, canciones e incluso una ópera lo recuerdan. Su poesía, su historia, su palabra han logrado juntarse con otras artes. Con otros lenguajes.
Lo más reciente que vimos en Guayaquil fue El funeral de Neruda, en el marco del Festival de Artes Escénicas que organizó Zonaescena, liderada por el bailarín y coreógrafo Jorge Parra. El grupo Assemble Teatro, procedente de Italia, trajo un conmovedor relato de la muerte del Premio Nobel de Literatura 1971. Fue como si se instalara ante el espectador ese instante, tan íntimo y desolador, en que el autor de Los versos del capitán dejó de respirar para siempre.
En escena estaban actores maduros, que con sus voces, con sus pausas y emociones creaban una atmósfera de dolor, de angustia. Neruda había muerto y los personajes transportaban a los momentos previos y posteriores a ese hecho. Interpretaban a Matilde Urrutia; a la hermana del poeta, al chofer. A muchos otros. Hablaban del entorno de miedo, de la dictadura que se había instalado en Chile, de la represión y de cómo desafiando al poder, la gente llegó al funeral a despedir al poeta. A su poeta y camarada.
Esa información la sabe, quizá, cualquier persona que haya leído sobre Neruda. La magia estaba en que ese instante se volvía presente a través del teatro. Tomaba forma, cuerpo, presencia. Volvía a transcurrir. Al pensar en el aniversario de Neruda, vienen a mi memoria las imágenes de esta obra. O el poeta frágil y enfermo, en el ocaso de su vida, que batalla contra un cáncer y que busca a una probable hija que tuvo, como lo ubica el chileno Roberto Ampuero en su novela El caso Neruda. Este autor ha dicho que el libro es ciento por ciento ficción, pero que para escribirlo estudió minuciosamente al escritor.
Son formas de acercarse a Neruda, a ese poeta inmenso que murió el 23 de septiembre de 1973. Y también resuena en mi oído la potente voz tanguera de Adriana Varela cuando canta el popularísimo: “Me gustas como callas porque estás como ausente/ y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca...”.
Twitter: @claramedinar
