Philip Glass en Guayaquil

10 de Diciembre de 2017
  • Al piano. Además de su monumental obra de compositor, Glass da recitales de piano.
  • En noviembre, Glass tocó en México junto con músicos wixárikas, como parte de un proyecto conjunto que lleva desarrollando desde principios de esta década.
  • Los músicos: Dante Anzolini (atrás) y Philip Glass, durante un ensayo en 2016 (Quito) junto con la Youth Orchestra of the Americas.
Carlos Icaza Estrada, especial para La Revista

“El más grande y versátil compositor de la música contemporánea en el mundo” según la crítica.

El concierto será el viernes 15 de diciembre, a las 19:30, en el Teatro Centro Cívico. Entrada libre.

La llegada de Philip Glass a Guayaquil para el estreno nacional de su octava sinfonía representa una oportunidad única para el público guayaquileño, gracias al apoyo del Ministerio de Cultura, el Ministerio de Turismo y el Centro Ecuatoriano-Norteamericano. Es la primera vez que el prolífico compositor estadounidense visita la ciudad, pero ya estuvo en Quito en el 2010 para el estreno de su concierto de cello con la Youth Orchestra of the Americas bajo la batuta del actual director de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, Dante Anzolini.

Philip Glass nació en Baltimore en 1937, en el seno de una familia judía de clase media. Su padre, cuya familia venía de Letonia, en el Báltico, era propietario de una tienda de discos; su madre, de origen ruso, era profesora de escuela. A pesar de sus limitados recursos, la familia Glass consideraba la música como un elemento importante de una verdadera educación, y se aseguró de que Philip y su hermana y hermano (él era el menor) recibieran por lo menos una clase de música cada uno.

Philip, quien había comenzado a estudiar en la primaria la flauta, instrumento con cuyo sonido se había enamorado, al terminar la guerra, a sus 8 años, continuó sus estudios en el prestigioso conservatorio Peabody de Baltimore. Sin embargo, cuando su hermano Marty tomaba clases de piano en casa, Philip se sentaba cerca para escuchar, y tan pronto terminaba la clase, se ponía a practicar, causando la ira de su hermano, que lo perseguía por toda la casa para pegarle.

Al mejorar las finanzas Philip tomó clases de percusión con el percusionista principal de la Sinfónica de Baltimore, quien además le enseñó lectura de partituras. También fue importante la música clásica y moderna, sinfónica y de cámara que escuchaba gracias a su padre, quien buscaba entender qué es lo que hacía que la música se venda, y terminó volviéndose un conocedor de la música clásica. Cuando su padre abrió una tienda en un barrio afroamericano, Philip entró en contacto con la música folclórica y la popular de su tiempo, pudiendo establecer similitudes entre el rock and roll y la música de los “hillbillies” (campesinos) de los montes Apalaches.

Ese contacto con la música popular continuó durante sus estudios de humanidades en la Universidad de Chicago, donde ingresó a los 15 años, en 1952, sin haberse graduado del colegio, precisamente porque aquella no lo requería. Allí, con la ayuda de un amigo, escucharía en vivo la música de algunos de los grandes maestros del jazz que iniciaron su carrera en Chicago, entre ellos Charlie Parker (el J. S. Bach del bepop”, de acuerdo con Glass), Stan Getz, John Coltrane, Bud Powell, Sonny Rollins y Theolinous Monk.

En el famoso Modern Jazz Room también escuchó al trompetista Chet Baker, y las cantantes Ella Fitzgerald y Sarah Vaughan. Pero también sacó ventaja del singular sistema educativo de la Universidad de Chicago, que invitaba al estudiante a explorar diferentes ramas del conocimiento en profundidad, reduciendo la importancia de las tareas y exámenes parciales en la evaluación del estudiante.

Por otra parte, la enseñanza de las ciencias ponía énfasis en el estudio de las vidas de los científicos y pensadores. Ambos factores, y sus frecuentes visitas a la biblioteca de la universidad, fueron la base para el desarrollo de los libretos de sus óperas, como Einstein on the Beach, Akhnaten, Appomattox y Satyagraha, entre otras. Sin embargo, fue en un viaje de verano a París, pagado por un tío, que supo que su futuro estaba en la música, cuando en la calle unos estudiantes lo invitaron al famoso Baile de la Escuela Normal de Bellas Artes. Según Philip, ellos reconocieron en él algo de lo que él era solo apenas consciente.

Así, continuó sus estudios de composición en el prestigioso Conservatorio Juilliard de Nueva York, donde siguió absorbiendo la música en vivo de los grandes del jazz, pero también lo último de la pintura, descubriendo las obras de Rothko, Pollock y de Kooning. Pero, insatisfecho con su dominio de la armonía y contrapunto, después de graduarse y trabajar componiendo música para las escuelas y colegios públicos de Pittsburg, en 1964, a los 27 años se fue a París con una beca Fullbright, a estudiar con Nadia Boulanger, un ícono de la música moderna, profesora de grandes compositores e intérpretes de la música académica y popular como Aaron Copland, Quincy Jones, Elliot Carter, Daniel Barenboim, Astor Piazzola y el quiteño Gerardo Guevara.

Influencias

En París, Glass fundó una compañía de teatro junto con su primera esposa, JoAnne, y algunos amigos, la cual se enfocaría en las obras vanguardistas de Berthold Brecht y Samuel Beckett, a las cuales él contribuiría con música original suya. Fue también en París donde conoció, trabajando en la producción de la banda sonora de una película americana, al compositor Ravi Shankar, el cual lo introdujo a la música hindú, y fue un mentor que lo influenció en su producción artística. Aun así, durante sus estudios en Juillard, Glass había estudiado y practicado el yoga y meditación con dos maestros hindúes diferentes.

Desde entonces la obra de Glass ha reflejado su trayecto formativo, incluyendo veinte óperas, conciertos para piano, cuarteto de saxofón, timbales, violín, y bandas sonoras para películas como Las horas, Kundun y El ilusionista, entre muchas otras, siendo nominado tres veces al Óscar a mejor banda sonora. También ha colaborado con artistas populares, como en su álbum Rework. Pero además ha incursionado en la música folklórica del mundo, incluyendo la de Latinoamérica, con álbumes como Itaipu y Aguas da Amazonia. En el 2015 presentó sus memorias, Palabras sin música, las cuales fueron publicadas en español a inicios de este año.

En noviembre tocó en la Ciudad de México junto con músicos wixárikas (también conocidos como Huichol), de la región central occidental del país, cerca de Guadalajara, como parte de un proyecto conjunto que lleva desarrollando desde principios de esta década. Así, la visita de Glass viene en el contexto de una extensa interacción con la música latinoamericana, que esperemos ahora incluya al Ecuador.

ANZOLINI Y LA OBRA DE PHILIP GLASS

El actual director artístico de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, Dante Anzolini, tiene una larga colaboración y amistad con Philip Glass, que se inicia en el año 1995, a través de la amistad de ambos con el compositor norteamericano Dennis Russel Davies.

En declaraciones a La Revista, Anzolini describe de la siguiente manera la contribución de Glass a la música: “El Philip creador representa el cambio más radical en la praxis de la composición contemporánea, iniciado a partir de la década del 60. Esto es un completo viraje del péndulo que había tocado el extremo de la Avant Garde propuesto por el eje Schoenberg - Boulez, para situarse en un giro total hacia la congruencia tonal, con técnicas de repetición y variación rítmica, que luego fueron denominados 'minimalismo'. Con influencias provenientes de tradiciones hindúes, así como elementos que constituyen lenguajes del rock y el pop, que proponen una centricidad manifiestamente tonal-modal”.

1995 Concierto a tres pianos con Philip Glass, Dennis Russell Davies y yo. Stuttgart

1998 Preparación de O Corvo Branco, ópera en estreno mundial World Expo 98 en Lisboa. Portugal.

2002 Estreno francés de la ópera Akhnaten en Strasburg, Francia

2004 Sinfonía coral Nº 5, estreno en Bruselas, Bélgica

2004 Sinfonía coral Nº 5, estreno en Washington, EE.UU.

2005 Grabación Sinfonía coral Nº 5, Viena, Austria

2008 Premiere en Nueva York de la ópera Satyagraha. Debut en el Metropolitan Ópera de Nueva York. El mayor éxito de ópera moderna en décadas.

2011 Satyagraha vuelve al Metropolitan de Nueva York.

2015 Estreno italiano de la ópera Akhnaten en Torino y Milano. Orquesta del Teatro Regio.

 

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