Duelo gastronómico

07 de Septiembre de 2014
Texto: Cortesía Disney

Protagonizada por la oscarizada Helen Mirren y la canadiense Charlotte Le Bon, la comedia Un viaje de diez metros muestra la cocina como un choque de culturas y un punto de encuentro.

La película, basada en la novela de Richard Morais, Un viaje de diez metros y dirigida por Lasse Hallström, se estrena el 19 de septiembre en las salas ecuatorianas.

Se trata de una comedia coproducida por Steven Spielberg y Oprah Winfrey, la cual cuenta la historia de una familia de cocineros de India cuyo restaurante se incendia en un ataque islamófobo y decide emigrar. Así, la familia Kadam resuelve mudarse a un poblado francés. Allí abre un nuevo restaurante, justo frente a otro local con una estrella Michelin (reconocimiento mundial como mejor restaurante) dirigido por la estirada Madame Mallory (Helen Mirren).

El filme muestra un duelo de culturas con las tensiones raciales en Francia como telón de fondo. Con Hassan Kadam (Manish Dayal) impresionado por la alta cocina francesa y también por la encantadora segunda chef de Madame Mallory, Marguerite (Charlotte Le Bon).

(la comida) Es un poderoso indicador de la cultura, la historia, el movimiento de la gente y la inmigración. Las cocinas y los restaurantes son sitios muy apasionados, porque la gente se apasiona...”, Helen Mirren

Helen Mirren

La actriz inglesa interpreta a Madame Mallory. Se refiere a su personaje como un pez grande en un estanque pequeño. “Dirige un exitoso restaurante en un pequeño pueblo de un país que toma la cocina absolutamente en serio. Y ella tiene una estrella Michelin. Su restaurante es su vida entera... es todo lo que ella tiene. Está absolutamente enfocada en su tarea, es muy profesional y está comprometida con la cultura de la cocina francesa y su historia”.

¿Cómo reacciona Madame Mallory cuando la familia Kadam abre un restaurante justo enfrente de Le Saule Pleureur?

Como se puede imaginar, para empezar no hay sitio para tantos restaurantes en un pequeño pueblo francés, así que la inauguración de otro la irrita de inmediato. Luego, además de todo esto, ellos sirven comida india y escuchan música fuerte, algo que también ofende el sentido del decoro y del buen gusto que tiene Madame Mallory. Ella siente que debe proteger no solo su restaurante, sino también la cultura francesa.

¿Cómo se siente la familia Kadam?

El padre se ha visto obligado a dejar su país a causa de la discriminación religiosa y, como inmigrante, es un hombre orgulloso y decidido a tener éxito. También es un profundo apasionado de la comida y de su familia, a la que alimenta preparando y vendiendo comida; por eso no dejará que nadie se ponga en su camino. Ambos son muy testarudos y están atrapados en su propia estrechez de pensamiento.

¿Por qué Madame Mallory comienza a cambiar su actitud?

Ella empieza a entender que la pasión acerca de su cultura y su entorno puede ser peligrosa. Es maravilloso amar a tu país y ser patriota, pero cuando comienza a inclinarse hacia un nacionalismo extremo, allí es donde se torna peligroso. Y allí es donde Madame Mallory ve el peligro en el camino que ha estado recorriendo.

¿Cómo fue trabajar con los jóvenes actores del elenco?

Siempre encuentro inspiración en los actores con quienes trabajo, y cuanto más jóvenes y menos experimentados sean, más inspiradores resultan para mí. Hay una frescura en su actitud; una apertura y una libertad que siempre me resultan alentadoras.

¿Cuál es la importancia de la comida en la película?

Es un poderoso indicador de la cultura, la historia, el movimiento de la gente y la inmigración. Y en esta historia, la comida es una de las razones centrales de la pelea entre dos restaurantes, una disputa que se intensifica rápidamente en una civilizada guerra de razas. Las cocinas y los restaurantes son sitios muy apasionados, porque la gente se apasiona por la comida que prepara… especialmente en Francia.

¿Cómo fue contar con Steven Spielberg, Oprah Winfrey y Juliet Blake como productores?

Todos estábamos un poco nerviosos porque sabíamos que Steven Spielberg estaba viendo el material diario, pero cuando obtienes una buena respuesta de uno de los más grandes maestros del cine, sabes que estás en buenas manos. Si él tenía algo para decir, siempre venía desde un punto de vista de su gran conocimiento y gran entendimiento, lo cual nos proveyó un fuerte sentido de seguridad. Luego, Oprah Winfrey, con su gran sensibilidad y entendimiento de las mujeres. Ella posee un entendimiento instintivo y maravilloso de la gente en general. Tener esa fuerza viva cerca de uno es una gran experiencia. Y también, desde luego, Juliet Blake, quien halló el material, compró sus derechos y tuvo fe en él. Ella es la madre de este proyecto, en verdad. Fue su fe en él lo que nos reunió a todos aquí.

¿Cómo espera que el público reaccione con el filme?

Las películas acerca de la comida deben ser viscerales y hermosas; deseo que el público salga del cine y vaya a un restaurante francés o indio. Algo más que espero es que esta película muestre al mundo una increíble, hermosa parte de Francia. Quiero que la gente se sorprenda con su belleza y sienta deseos de ir y visitar esa parte del mundo. Creo que la película es una experiencia hermosa, deliciosa y divertida.

Charlotte Le Bon

La actriz canadiense realiza su debut en el cine estadounidense con esta película. Su trabajo en Francia incluye papeles en Asterix & Obelix: al servicio de su majestad, La Stratégie de la Poussette, La Marche, Libre Et Assoupi y Le Grand Méchant Loup. También en la más reciente La espuma de los días de Yves Saint Laurent. Hija de la actriz Brigitte Paquette, Le Bon comenzó su carrera como una comediante/meteoróloga en el noticiario de la televisión francesa Le Grand Journal (Canal +).

¿Cómo es su personaje en la película?

Marguerite es una mujer joven y apasionada que vive en un pequeño pueblo en el sur de Francia, donde trabaja en Le Saile Pleureur, un renombrado restaurante calificado con una estrella Michelin. Ella es la sous chef (o subjefa de cocina); es una amante de la cocina y sueña con ser dueña de su propio restaurante algún día.

¿Cómo conseguiste el papel y qué te atrajo de él?

Me presenté a dos audiciones separadas, que fueron las primeras que di en inglés. Para la primera de ellas solo leí el diálogo, pero en la segunda, Manish Dayal y yo interpretamos varias escenas para Lasse Hallström, lo cual fue muy divertido porque él nos dejó improvisar. Me gusta el hecho de que Marguerite sea un personaje tan apasionado con la cocina. Resulta muy inspirador. Como actriz, una busca interpretar un personaje que experimente cierta evolución, tal como Marguerite; eso fue lo que me atrajo del rol.

¿Cómo se relaciona Marguerite con la familia Kadam?

Marguerite se encuentra camino a casa desde el mercado, cuando descubre a una familia que tuvo problemas con su camioneta y parece totalmente perdida. Se apiada de ellos y los trae de regreso a su casa. Así se convierte en amiga de Hassan, cuya familia es propietaria del restaurante frente a Le Saule Pleureur.

¿Cuál es el conflicto que surge cuando inaugura Maison Mumbai?

El restaurante de Madame Mallory es una institución en la zona y posee una estrella Michelin. Hay una casa vacía del otro lado de la calle, donde muchos restaurantes en el pasado intentaron funcionar, todos ellos sin éxito. La familia Kadam compra esa propiedad e inaugura Maison Mumbai. Madame Mallory resiente cualquier competencia y no quiere nada que se interponga en su camino hacia la búsqueda de una segunda estrella.

¿Cómo es la relación entre tu personaje y Hassan?

Él llega a la vida de Marguerite de forma inesperada y al principio ella desconfía un poco de él. Ambos comparten la misma pasión por la comida, pero ella pronto comienza a tener otros sentimientos por él. Sin embargo, cuando Hassan le dice a Marguerite que él quiere ir a Le Saule Pleureur para aprender cocina francesa, ella no se siente nada feliz al respecto y se vuelve competitiva y un poco celosa.

¿Cuál fue tu reacción al enterarte de que Helen Mirren había sido elegida para interpretar a Madame Mallory?

Una emoción absoluta. Ella es tan potente, tiene tanta clase y es una auténtica mujer moderna. Ella solo hace lo suyo sin importar lo que otra gente pueda decir.

¿Cómo es trabajar con Lasse Hallström?

Conversamos acerca de mi personaje antes del inicio del rodaje y él me dijo que el rol de Marguerite no debía ser gracioso, razón por la cual me había elegido a mí para interpretarlo. Él quería que yo le diera vida a ella y confiaba en que podría hacerlo.

¿Debiste tomar clases de cocina antes de comenzar el rodaje?

Manish Dayal y yo tuvimos un par de clases de cocina antes de comenzar a filmar. Lo más importante que aprendí es que la cocina se trata de gestos y lenguaje corporal. Además, hay cierta actitud que todos los cocineros deben tener.

¿A qué público crees que le gustará esta película?

Es para todo el mundo. Te hace sentir feliz, hace que te den ganas de viajar y te hace soñar. Se trata del amor, de la pasión, de la comida; trata de la familia también, así que todo el mundo puede reconocerse en ella.

 

Papas gratinadas
(receta de la película un viaje de diez metros)

Ingredientes:

  • 1,5 litros de leche
  • Nuez moscada recién rallada
  • 1 manojo de hierbas aromáticas
  • 2 dientes de ajo
  • 165 ml de crema de leche
  • 1,2 kg de papas de pulpa firme
  • Pimienta recién molida
  • 120 g de queso gruyer
  • Mantequilla sin sal blanda para gratinar
  • Sal y pimienta
Preparación:

  1. Precalentar el horno a 190°C.
  2. Colocar una capa de manteca en una fuente profunda, apta para horno, y reservar en el refrigerador.
  3. Mezclar la leche, la nuez moscada recién rallada, el manojo de hierbas aromáticas y el ajo en una olla mediana, a fuego medio. Llevar el líquido a ebullición, retirar del fuego y dejar reposar durante cinco minutos.
  4. Mientras tanto, lavar y pelar las papas y cortarlas en rodajas finas de aproximadamente 3 mm. No enjuagarlas ya que se necesita el almidón. Colocar las rodajas en capas en la fuente untada con manteca y condimentar cada nueva capa con sal y pimienta.
  5. Mezclar la crema con la leche caliente y luego incorporar las papas a través de un colador de malla fina. Dejar reposar entre uno y dos minutos. Las papas absorberán el líquido restante. Repetir la operación hasta haber utilizado toda la mezcla de leche. Sazonar la parte superior y espolvorear con una capa generosa de queso rallado. Cubrir el plato con papel para hornear enmantecado y papel de aluminio.
  6. Colocar en el horno y cocinar durante una hora o hasta que las papas se puedan perforar fácilmente con un cuchillo.
  7. Retirar el papel aluminio y el papel manteca y colocar nuevamente la fuente en el horno hasta que la superficie tome un color dorado.
  8. Retirar del horno y dejar reposar entre 5 y 10 minutos antes de servir.

Nota: rinde 8 a 10 porciones
Cortesía: Le Cordon Bleu y Disney

 

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