‘A mi madre se le escapó la mascota’

25 de Diciembre de 2011

Me encanta todo tipo de animales, en especial los perritos, me parece que son tan fieles al hombre que merecen ser amados, cuidados y respetados, mimados. Hace cinco años me regalaron un perrito de raza shih tzu, era muy peludo y acepté tenerlo porque iba a compartir su cuidado con mi hermano menor, mientras yo tuviera que salir a trabajar.

Al principio lo sacaba a pasear y a que haga sus necesidades biológicas, llevando una funda y una palita  para recoger las heces, como se acostumbra en otros países. Todo iba bien hasta que entré a trabajar y el tiempo no me daba para atenderlo. Así que me esperancé en mi hermano, porque era el único de la casa  a quien yo podía confiar su cuidado, porque lo quería y estaba pendiente de decirme que ya era tiempo de llevarlo al médico veterinario o a la peluquería.

Pero un día resulta que mi hermano tuvo que salir por la tarde a un acto de su colegio y mi mamá por descuidada dejó salir a nuestra pequeña mascota a la calle. Dice que la buscó  y no regresó. Esto nos causó a mi hermano y a mí mucha angustia y llanto. Se nos había desaparecido nuestro querido perrito. Comenzamos a tratar mal a nuestra madre, pues pensamos que lo hizo a propósito.

Así estuvimos un buen tiempo, hasta que un tío nos dijo que necesitábamos ayuda psicológica, porque nuestra madre no merecía ser tratada así. Él nos pagó un psicólogo que responde cartas en El Especialista y este nos ayudó a que nos perdonáramos todos. Si bien nuestra mascota era importante, nuestra madre mucho más. Y lo sentimos. 

Martín,
Guayaquil

  Deja tu comentario