Jugando cartas

Por Mariquita Noboa
23 de Febrero de 2014

¿Jugamos 40 o bridge?  Puede ser canasta o dudo, póker o rummy, en cualquier caso hay que aceptar las reglas que cada juego impone.  Jugar cartas, barajas o naipes también impone normas de cortesía:

  • Jugar limpio y sin trampas.  Los tramposos siempre quedan al descubierto.
  • Un jugador no se debe ausentar cuando se da cuenta de que va perdiendo.
  • Si se juega en pareja, no echarle la culpa de la pérdida al compañero.  Eso no es de personas decentes.
  • Una persona de honor acepta la derrota con elegancia.
  • Hay quienes tienen como hábito el encuentro de un día y hora determinada para el juego de cartas.  Si usted conoce las preferencias de su familiar o amiga, no la interrumpa durante su tiempo de juego, no le va a prestar la suficiente atención.
  • Conozco a un grupo de amigos que se reúnen a jugar 40 una vez al mes.  Apuestan cincuenta centavos por mesa, se ponen al día en los chismes, comen bien, disfrutan del encuentro, pero no consideran al contrario como su enemigo.
  • La mejor sugerencia en cualquier encuentro de esta naturaleza:   manténgase ecuánime.
  • No haga alarde de sus habilidades, o del “chiripazo” que le jugó.
  • Si el juego es en una casa particular, espere la invitación correspondiente.  No está bien “caer” de visita.
  • Demuestre su nivel de decencia felicitando a quien gana la partida.
  • Si no está jugando, controle sus impulsos.  No “meta carbón” ni pase datos falsos para desviar el juego de otros.
  • Decían las abuelas que “en la mesa y en el juego se conoce quién es quién”.
  • Si estando en medio de una reunión se compone un equipo para jugar y a usted no le gusta el juego de cartas, hágalo saber con antelación, pero sin ser hiriente.
  • Hay mesas destinadas especialmente para jugadores.  Tienen espacios para el vaso, pero no para platos.  No lleve comida a la mesa de juego.
  • Si hay competencia, el juego pone en evidencia el nivel de educación.  Sea prudente.
  • Para invitar a una partida de cartas no se necesitan invitaciones impresas.  Un recordatorio telefónico es suficiente.La anfitriona de una tarde de juegos no está obligada a invitar comida.  Puede brindar bocaditos y bebidas ligeras.  De lo que no se puede olvidar es de las servilletas, siempre serán su mejor aliada. Bueno…  ahí les dejo el naipe…

mtnoboa@hotmail.com

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