Relaciones sin presión
Mi novio y yo somos una pareja joven en plena luz de las relaciones sexuales, pero no me he atrevido a tenerlas. Él es muy comprensivo con respecto a ese tema y no me presiona. Siento que si las practico tendré remordimiento, porque vengo de una familia conservadora, pero al mismo tiempo es más el deseo de tenerlas. Mi novio y yo tenemos planes de matrimonio. ¿Cómo tomar una decisión?, ¿qué es lo más importante para la relación y sin ser egoísta?
Jazmín,
Ciudad de Juárez, México
Usted es una persona de indudables valores y principios que han guiado y guían su vida. Su carta demuestra indudable valentía. Su convicción de entregarse en la intimidad exclusivamente a su esposo después del matrimonio no es una señal de debilidad, es un indicador de fortaleza. Muchos creen que el ser virgen (o también virgo en el caso del hombre) es una “enfermedad” grave de la cual hay que “curarse” perdiéndola cuanto antes. Para mantenerla se requieren verdaderas convicciones, fuerza de voluntad, tino, constancia, entre otros. Su novio realmente ha mostrado amor hacia usted, al no presionar ni insistirle que le otorgue la tradicional (pero no conveniente) “Prueba de amor”, que es más que nada un medio de chantaje a quien se desea solo carnalmente. Se ha comprobado por medio de varios estudios que se han efectuado en Occidente y Oriente que aquellas damas que llegan vírgenes al matrimonio con un esposo comprensivo y afectuoso habiendo disfrutado de un noviazgo enriquecedor donde se han aprendido a conocer, a otorgarse cariño, amistad y fidelidad, tienen una proporción de éxito (armonía, entendimiento, camaradería, respeto, empatía...) en su vida conyugal en más de un 300% más que aquellas que se han entregado reiteradamente a su novio. Lo más seguro es que si usted se entrega a él sin casarse le abrumarán una serie de remordimientos que podrían constituirse en complejos de culpa. No mantenga un noviazgo demasiado largo, planifique y organice su casamiento sustentándose en realidades no en desear tener una boda de “cuento de hadas”. El mantenerse virgen antes de casarse no debilitará su relación, por el contrario la consolidará dado que fortalecerá las bases que hasta ahora los ha unido: amor romántico, amor y comprensión de amigos, así como un amor basado en valores. (F)
Dr. Eduardo Santillán Ph.D.,
Terapeuta de individuos, parejas y familias.
Telfs.: 098-720-2411.
