Nervios insuperables

15 de Mayo de 2016

Tengo 21 años, soy nervioso desde pequeño, no sé cuál es la razón, pero en el trabajo me pongo muy nervioso cuando estoy haciendo una actividad que se me indique, aunque la haya hecho varias veces antes. Me pongo supernervioso cuando hablo con las personas, no se me entiende porque hablo rápido, las manos me tiemblan, aunque hago el esfuerzo para no hacerlo y respiro hondo. ¡Ayuda!

Wallinson Jaquez,
Guayaquil

Wallinson, el primer paso para superar una dificultad es reconocer que la tiene, es lógica su preocupación, entiendo que padece de ansiedad. A pesar de la escasa información que nos otorga y presumiendo que el único problema de base suyo es el que nos ha mencionado, procedemos a responder a su inquietud: los síntomas son difíciles de administrar y ponen a la persona en condiciones de malestar emocional que le impiden tomar decisiones simples y desenvolverse con suficiencia y calidad adecuada.

Las señales más comunes son: tensión en el cuello, hombros y espalda, dificultades al respirar, visión nublada, sofoco, taquicardia, opresión en el pecho, nudo en el estómago, náuseas, sudoración, temblor, hormigueo en las manos, inestabilidad, temblor, entumecimiento en las piernas, fobia escénica, a las personas, etc. La tensión es constante, lo cual afecta en forma paulatina al organismo, ya que se presentan deficiencias en la alimentación, imposibilidad de un buen descanso, inquietud reiterada, dificultad para mantener una conversación o un encuentro sin alterarse.

Cuando se padece de ansiedad, se tiende a exagerar los problemas, a preocuparse en exceso antes de que ocurran, a esperar lo peor y a decirse que cuando lleguen los momentos difíciles, no será capaz de hacerles frente. También, al notar los síntomas de la ansiedad, tenderá a pensar que está físicamente enfermo y que algo terrible va a ocurrir. Este pensamiento no hará sino aumentar los síntomas. Incluso, antes de que ocurran las situaciones mencionadas, dará por supuesto que se va a poner nervioso, lo que, efectivamente, sucederá. Son círculos viciosos que se van estableciendo en torno a la ansiedad.

Gracias a Dios, su situación es totalmente superable, es menester que acuda a un especialista para que inicien un proceso exitoso de recuperación. Decídase. Usted puede y debe. (F)

Dr. Eduardo Santillán,
Ph.D. neuropsiquiatra, psicoterapeuta de individuos, parejas y familias, especializado en afectividad crítica, adicciones emotivas, psicosexualidad y en casos complejos y traumáticos.
Telfs.: 098-720-2411, 098-017-5745
dr.eduardo_santillan@hotmail.es

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