Le cuesta socializar
Soy un egresado de la universidad, tengo 26 años, pero a los 21 empecé a vestirme de manera fúnebre, ropa negra, un collar con un pentagrama o una gargantilla de puntas. Suelo comprar maquillaje blanco para parecer gótico. Prácticamente soy el hombre de las tinieblas.
No tuve una infancia normal y mi adolescencia fui bastante solitario. Soy amante de la música y sé tocar varios instrumentos. Siempre me ha costado socializar, a tal punto que a la fuerza intentaban llevarme al psicólogo en el auto de un compañero de la U. La gente cree que tengo un calabozo en casa (es falso), dicen que soy del diablo.
No sé si de verdad necesite un especialista, ya que creo que simplemente es mi estilo de vida, duélale a quien le duela seguiré en pie. ¿Qué piensan ustedes?
N. N.,
Guayaquil
Veo por lo que escribe que se ha sentido solitario desde hace años, tal vez es muy introvertido y la mejor manera de llamar la atención es con un atuendo diferente. Me parece que tiene amigos que se preocupan por usted y por eso han querido, no de la forma correcta, ayudarlo a buscar orientación.
En este momento, al escribir esta carta, ha dado un paso importante, consultando de manera profesional sus inquietudes.
Le sugeriría que analice si la impresión que causa es la que realmente desea. Si, en el fondo, busca ganarse amigos y encontrar una pareja, causando temor no va a hacerlo. Si parece gótico, es probable que encuentre un grupo similar, pero si solo es un disfraz, un maquillaje, y usted desea socializar más, este no es el camino correcto.
La música es una salida para situaciones difíciles, como cuenta que fue una parte de su infancia y el sentirse solitario en su adolescencia.
Ahora ya es un adulto joven, con una carrera por delante. Tiene opciones de desarrollar su profesión y su vocación musical. Espero que esté siguiendo una carrera que le guste, para que disfrute su ejercicio.
Al consultar si necesita ayuda psicológica, le diría que eso es algo que solo usted puede saber, porque la forma de vestir puede que sea siempre su estilo, si es genuino. Los psicólogos orientamos a quienes acuden porque sienten que necesitan hacer cambios en su vida.
A veces hay experiencias que nos marcan tanto que duele recordarlas. Al evitar estas memorias, siguen latentes y nos siguen afectando. En esto, una terapia puede ayudar a que las deje atrás, a interpretarlas desde otro punto de vista y que pierdan el significado doloroso y sean solamente hechos concretos. De esta manera va a superar cualquier situación traumática y puede que se vuelva más abierto y socialice sin temores. ¡Anímese a dar ese otro paso! (F)
Cecilia Chávez-Bowen de Larrea,
Psicóloga y terapeuta.
Telf.: 099-537-7558
