Hijo golpeó a la mamá
Se me está haciendo muy difícil criar a mi hijo de 10 años, se porta terco y contestón. Hace algunos días peleando con una amiguita dijo una palabra soez y le tapé la boca, pero con firmeza. El creyó que era un golpe y lo respondió pegándome con el puño cerrado en la barriga. Vivimos en casa de familiares, porque estoy pagando la nuestra, pues el padre del niño nunca se hizo responsable económica ni afectivamente. Hice contacto vía correo, pero siempre dio evasivas hasta que desapareció por completo. Siempre me he empeñado en ser una buena madre, trabajo y le doy lo que él necesita, además de buenos ejemplos morales y educativos. Incluso está haciendo la catequesis para hacer la primera comunión, pero a veces no quiere ir por quedarse viendo fútbol, salimos a pasear, al cine, nos hemos ido de viaje a lugares lejanos y por varios días. Es mi amigo más que mi hijo, pero por este comportamiento me siento culpable e infeliz al no haberle dado un hogar con un padre responsable, mi niño está creciendo y temo que se me salga de las manos.
María,
Guayaquil
Es normal la inquietud de los padres ante una conducta inesperada como la que usted señala por parte de su niño, por lo que comprendo su preocupación. Pero es necesario señalar que ante cualquier mal comportamiento de nuestros hijos, ante cualquier inconducta, no debemos perder la calma, no debemos gritarles, no acusarlos de ser malos. Esto no ayuda. Lo que sí debemos hacer es enseñarle a manejar sus emociones, a controlarlas, y esto se logra con el ejemplo. Es mejor esperar que se pase el berrinche, la euforia del momento y luego sí hablar sobre lo ocurrido. Muestre a su niño que lo que hizo no era correcto. Enséñele a reconocer sus errores, a disculparse. Pero no ponga tanto énfasis en lo malo que hizo, más bien resalte sus virtudes. Hable con tranquilidad, que sepa su hijo cuánto usted lo ama, que sepa que lo que hizo la entristeció. Procure no suplir la ausencia del padre siendo amiga. Usted es su mamá, es el referente de la autoridad. Autoridad que desde pequeño debe aprender a respetar.
Jorge Tello,
Psicólogo clínico. Telf.: 230-2997.
