Granitos con mala apariencia

01 de Febrero de 2015

Tengo 20 años y peso 160 libras. Desde pequeña alrededor de los 8 años tengo la entrepierna (refiriéndome a la parte de los muslos) oscura. Además a partir de los 10 me empezaron a salir como granitos, aunque prácticamente son como espinillas, y en la actualidad tengo muchos. No me duelen ni me molestan, pero tienen una mala apariencia. ¿Qué me aconsejarían?

Michela,
Guayaquil

La pigmentación de la cara interna de los muslos se denomina acantosis nigricans, suele acompañarse del oscurecimiento de otras zonas como axilas y cuello, y con menor frecuencia codos, rodillas y nudillos. Como menciona su peso, aunque no su estatura, puedo pensar que tiene sobrepeso, y quizás usted ya conoce que este podría ser el factor desencadenante o causal más importante en su problema. La acantosis nigricans (AN) es una dermatosis, que se caracteriza por la pigmentación de las zonas cutáneas antes mencionadas, la piel se ve engrosada, de aspecto aterciopelado y en algunas ocasiones con lesiones de aspecto verrugoso. Es más frecuente en personas de piel oscura. Esta patología presenta algunas variedades. La más frecuente es la variedad benigna, que se asocia a la obesidad y que puede tener un antecedente genético hereditario. Por ser una persona joven, usted puede encasillarse en este grupo, sin embargo, es importante una valoración dermatológica especializada que descarte algún compromiso interno asociado. Otro grupo de pacientes con AN podría asociarse a un trastorno de insulinorresistencia con niveles altos de insulina, con cuadros establecidos de diabetes mellitus, hipotiroidismo, síndrome de Cushing, administración de ciertos medicamentos como corticosteroides, ácido nicotínico, etc. Se debe descartar también la presencia de ovarios poliquísticos, hirsutismo, irregularidad menstrual, para enfocar su causa. Un menor porcentaje de pacientes pueden presentar una AN de variedad maligna, por lo general en personas de mayor edad, asociada a tumores de tubo digestivo, aparato genitourinario, etc. Las lesiones inflamatorias que menciona se deben al roce constante de estas dos áreas, lo que ocasiona una foliculitis constante y debe ser tratada con antibióticos. Le aconsejo en forma general, controlar su peso, realizar ejercicio físico y acudir al especialista.

El tratamiento se basa en el uso de despigmentantes, queratolíticos, y/o retinoides, una vez descartadas las otras afecciones sistémicas. (F)

Dra. Bertha Naula Merchán,
Dermatóloga.
Telfs.: 292-4106, 600-3342.

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