Adolescente con sobrepeso

16 de Febrero de 2014

Soy una adolescente de 16 años, mido 1,65 m y peso alrededor de 70 kilos. Toda la vida he sufrido de sobrepeso, en realidad nunca he sido flaca, ahorita que estoy en mi etapa de juventud me interesaría mucho poder bajar de peso, sobre todo de una manera correcta, pero no cuento con la ayuda de nadie, pues mis padres nunca están pendientes de mí, pareciera que yo ni existiera, pues solo se ocupan de mi hermana mayor. Ella tiene 19 años y es superflaca. Mi mayor problema es que no puedo dejar de comer, si he almorzado hace un instante, 10 minutos después estoy muerta de hambre: como, como, y no paro de comer. Otro problema es que vivo una vida sedentaria, no hago ejercicios quizás por flojera, o quizás porque no tengo a nadie que me incentive verdaderamente. No tengo primas, ni amigas que me digan, ¡hey, vamos a trotar o correr!, porque ellas están superflacas, no tengo a nadie, y ojo que no es drama. Tampoco tengo acceso a dinero, así que no puedo visitar a un nutricionista y tampoco tengo quien me lleve porque no le intereso a nadie en mi casa. Necesito ayuda, me siento mal. Todo mi ambiente gira alrededor de las flacas con buenos cuerpos que tragan y tragan, pero que ni así pierden su hermosa figura, y estoy yo a la que nadie toma en cuenta, nadie ayuda, nadie hace nada. Yo sé que el cambio debe empezar por mí, pero qué se hace cuando nadie cree en ti ni en los cambios que puedes lograr.

N.N.,
Guayaquil

Usted presenta, de acuerdo con los datos que ha referido, un IMC (índice de masa corporal) compatible con el diagnóstico de sobrepeso tipo I (SEEDO). Lo cual es una buena noticia al no tratarse de obesidad. Me impresiona el alto nivel de insatisfacción que refiere “10 minutos después de almorzar con hambre” nuevamente es preocupante. Lo que me lleva a pensar en varios problemas:

-No está consciente de lo que está comiendo (el mensaje no está llegando al cerebro). Tal vez deba sentarse a la mesa y masticar los alimentos un poco más de tiempo.

-El nivel de ansiedad es tan alto que no logra percibir el estado de plenitud de su estómago. Al estar pendiente de las interacciones de los otros miembros de la familia no puede poner atención en sus percepciones.

-El sedentarismo permanente ha colocado su estructura muscular en un estado de enlentecimiento metabólico, que conduce a un estado de apatía particular.

¿Qué hacer?

1) Tratándose de una adolescente con educación secundaria, le sugiero conversar con sus padres con el propósito de que ellos puedan conocer su sentir. Y le puedan proporcionar un poco de apoyo.

2) Buscar apoyo psicológico con la psicóloga de su colegio.

3) La alimentación puede estar siendo muy “refinada”, esto es, con altas concentraciones de azúcar simple. Evite los cereales de desayuno con azúcar simple, los postres y las bebidas dulces, de tal manera que solo consuma productos y preparaciones frescas y naturales.

4) Finalmente, recuerde que nadie más que usted misma se puede ayudar completamente.

Dra. Mariuxi Egas Miraglia,
Médica nutricionista. Telfs.: 099- 491-8760, 244-6779.

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