‘Sapeando’ en El Mercadito

18 de Mayo de 2014
Texto y foto: Mauricio Torres / mt@mauricio-torres.com

Paseando por el enésimo Mercadito, edición posdiluvio, me topé con Stephanie. Si bien me llamó la atención por los dos ojos serigrafiados en su camiseta, la verdad es que su personalidad va más allá de la imaginería de su ropa.

¿Cómo es tu mundo audiovisual?
Fotografía, asistencia de dirección, malabarismo, lanzo fuego, lo que sea.

Qué bestia, qué bacán. Ahora sí, ¿qué onda con tu facha? Desde que se nos vino el diluvio, ¡todos andan con pantalones cortos ahora!
Me lo perdí, no estuve aquí.

¿Por dónde andabas?
En Quito. Estaba huyendo de acá.

¿A qué le huías?
¡Del calor! De la rutina... ¡no sé!

Entonces tu has de andar en tacos o en zancos.Volviendo a lo principal, ¿qué onda con tu facha?
¡Yo qué sé! Shorts, camiseta, zapatitos. Las únicas flats que tengo.

¿Qué me quieres decir? Me refiero a  que son a los que más palo les doy. O si no sandalias. ¡Muy pocos tacos!

¿No te gusta andar entacada?
¡Me encantan! Solo que no me siento muy cómoda.

O sea, solo para verlos en vitrina.
¡Y en los pies también! Pero caminar es un desastre. Solo que no me siento yo.

¿Y si te llevan a bailar salsa sobre una sola baldosa?
Tendrían que ser unos tacos muuuy cómodos.

Esos ojazos que tienes en tu camiseta, que me llamaron mucho la atención...
Tiene a... ¡Twiggy!

Ilústrame.
Es una modelo de los años 60, famosa por su corte de pelo, por ser extremadamente flaca.

¿Entonces fomentas la desnutrición en la mujer?
¡Para nada! Me gustó la camiseta y estaba barata. Punto (risas).

Yo pensaba que Twiggy había sido un bajista de Marilyn Manson.
¡Ni idea! No conozco mosco.

¿Qué haces por acá?
Ehhhhh... ¡sapeando!

¿De miranda nomás?
Sí, hay cosas bonitas, otras no tan bonitas. Pero como que la relación precio-calidad todavía no está ahí.

¿Le compraste algo a tu mamá?
¡Un beso y un abrazo! Es que a lo mejor le compro algo que no le gusta.

¿Por qué mejor no la mandas a un spa? Aprovecha que andan en descuento por esta época, no seas tacaña.
Sí, pero ella se lo puede pagar sola.

Por lo que me dices, tu Día del Niño seguramente fue muy miserable.
Sí, ¡pero ya hace tiempo dejé de ser niña!

¿Qué le parece esta facha?
Coméntenos

  Deja tu comentario