El hada de la sobrina

12 de Febrero de 2017
Texto y fotos: Mauricio Torres | mt@mauricio-torres.com

Vilmente ignorado por su sobrina, por lo menos la tía (Giancarla) sí me dio pelota y me dejó entrevistarla. Estaba con su madre y la otra abuela de Giuliana (la sobrina), paseando por el Policentro en plan de tomar helados, en su primer día de vacaciones por Ecuador.

¿Qué onda con tu facha?
Estábamos buscando looks de princesas con mi sobrina. Las dos nos pusimos flores en la cabeza.

Sí, no todos los días veo a alguien con flores en la cabeza.
En realidad, mi outfit diario sí tiene bastantes flores. Me encantan. O si no, trapos en la cabeza, siempre.

¿Y el resto?
Esta falda en realidad era de mi señora madre y fue motivo de algunas peleas. Hasta que ahora es mía y llegó a vivir a Barcelona.

¿Se la robaste a tu mamá? La dejaste sin opción a reclamo.
Yo no lo digo así, pero sí. Ahora es una de mis faldas favoritas. Me encanta que tiene mucho movimiento y ando fresquita siempre.

Acá todo el mundo vive vestido como un shawarma (envuelto). Apretado, apretado...
Aquí sí, y allá también se ve un montón.

¿En verano?
Sí... mmm... bueh... en verano la gente allá anda un poco más desnuda que vestida.

¡Vámonos a Europa!
Es que sí, en Guayaquil me parece una ridiculez que todos tengan que andar siempre con jeans, sacos. Con el clima que tenemos, deberíamos poder ir a trabajar en vestido o un short decente.

¡Exacto! ¿Chancletas?
Sí. Hace demasiado calor.

¿Camisetas sin mangas?
Depende en qué trabajes.

¡Tu estás sin mangas!
Es para lucir el tatuaje. Una flor y atrás un hada.

¿Vas a disfrazar a tu sobrina de hada?
Hoy nos vamos a pintar la cara de gatitos.

¡Qué bien! ¿Estás haciendo campaña por ser su tía favorita?
No soy la única, pero soy la favorita.

Digo lo mismo sobre mi sobrino. ¿Cómo se llama ella?
Giuliana.

¿Cómo así migraste?
Estaba en Ecuador y me aburrí, buscaba un cambio y mi mamá, siempre con sus geniales ideas, comenzó a decirme para que me vaya a Europa desde el 2008. Primero me decía “ándate a Argentina”, y yo le decía que no quería. Dos años más tarde, yo estaba llorando desesperada que me quería ir a Argentina. Lo mismo me pasó ahora con Europa.

Entonces, cada vez que tu madre te sugiere algo que detestas, solo hazlo.
¡Más o menos! (E)

¿Qué le parece esta facha? Coméntenos

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