CONVIVENCIA ESCOLAR
Enseñe a sus hijos a tener cuidados especiales cuando acudan a un lugar, sin exagerar en las recomendaciones, porque si no se pondrán tensos ante tanta información.
Advierta que cuando vayan al baño deben tener la privacidad necesaria y utilizarlo de manera correcta. Que por ningún motivo alguien debe ingresar con ellos, peor aún mirar o tocar sus partes íntimas.
Recalque que si debe compartir los baños con compañeros mayores, deben tomar las mismas medidas: ingresar, cerrar la puerta y salir una vez terminado su uso.
Indique que el baño no es un lugar para jugar, bromear, ni permanecer más tiempo del requerido.
Averigue en la escuela y colegio donde estudiará su hijo si hay personas que hacen turnos cercanos a los baños o lugares en los que se pueden dar ciertas conductas no adecuadas. O para prestar ayuda en el momento necesario.
Eduque a sus hijos con una actitud asertiva. Esto implica aprender a respetarse a sí mismo, a los demás, ser positivo, directo, saber escuchar y decir lo que le sucede. Les ayudará a saber reaccionar frente a agresiones, molestias o malos momentos que a veces se pasan en instituciones escolares.
Recomiende que tengan cuidado con personas desconocidas, no irse con ellos ni aceptar lo que les ofrecen, ni invitaciones, comidas, regalos, entre otros.
Inculque confianza en sus hijos. Dígales que si se genera alguna situación negativa con algún profesor, deben comunicarle inmediatamente lo que está sucediendo para acudir donde él a tratar el asunto. Y si no hay arreglo, que hablará con algún coordinador o inspector, y como último paso, con algún miembro de la directiva.
Recuerde que si todas estas recomendaciones se inculcan en el hogar, es seguro que se evitarán muchas situaciones desagradables y que los niños y jóvenes aprenderán a manejarse con autonomía y confianza.
Fuente: Dra. Patricia Zeas de Alarcón. Especialista en Educación y directora del Liceo Panamericano.
Telfs.: (09) 795-6965, 233-1152
EL DESAYUNO
Pida que desayunen Es imprescindible que inculque este hábito en sus hijos desde que son muy pequeñitos. Representa del 20% al 25% de los nutrientes que necesita diariamente el organismo para funcionar correctamente durante el día.
Explique su eficacia Investigaciones demuestran que los niños que desayunan en casa tienen mejor desempeño físico y mental, en la escuela y suelen tener mejores calificaciones. Mejoran en los diversos campos, entre los que se destacan la lectura, las matemáticas, el vocabulario, la memoria y la fluidez de la palabra.
Si no desayuna, ¿qué? Puede presentar decaimiento, náuseas, fatiga, mal humor, debido al déficit de glucosa (azúcar), que es el principal combustible energético que produce el ayuno. Deben saber que a primera hora de la mañana el organismo lleva entre ocho y diez horas sin recibir ningún alimento. La falta de glucosa empuja a que el cuerpo utilice otras reservas energéticas, lo que causa múltiples alteraciones en el normal funcionamiento orgánico.
Inicie el desayuno de su hijo con algo ligero y en pequeñas cantidades, uno completo no implica un gran banquete.
No olvide incluir en la lonchera el agua, para que no se deshidrate.
Fuente: Dra. Lorena Miranda Párraga Médica nutricionista de Nutricen Center.
Telfs.: 238-5567, 238-7804
CUIDADO CON EL SOL
Compre protector solar Aplíquelo a su hijo antes de enviarlo a la escuela, aun en días nublados. Recuerde que los rayos ultravioleta “ni se los ve ni se los siente”.
Hable con los maestros Sugiera que no expongan a su hijo a realizar paseos o juegos después de las 10:00, pues aunque usted le haya puesto bloqueador solar en casa después de tres horas ya le pasó el efecto protector.
Reaplicación Pida a su hijo que no juegue en áreas descubiertas sin haberse reaplicado el protector solar. Incluso volver a usarlo si se ha mojado la cara después del juego. El agua en la cara actúa como efecto de lupa, filtrando mayor cantidad de rayos solares.
Reúnase con otros padres para hablar con las autoridades del plantel para que sean parte de la campaña para prevenir el riesgo de daño solar. Sugiera que pongan cubiertas de policarbonato en patios y canchas para que filtre solo la luz pero no los rayos nocivos. O cambiar la hora de deportes hasta antes de las 10:00 o después de las 16:00.
Conozca que el sol a pesar de que produce vitamina D en la piel también causa quemaduras y el cáncer que se origina muchos años después. Existen muchos estudios que demuestran que son las exposiciones solares que se producen antes de los 18 años de edad (época colegial) las causantes de las manchas y esta enfermedad.
Más cuidados Pida a su hijo que no tome agua directamente de la llave. Algunas bacterias como el Helicobacter pylori se adquieren por este medio.
Recuerde a su hijo que debe lavarse las manos antes de comer algún alimento, para evitar adquirir o transmitir otras enfermedades causadas por virus y parásitos.
Si le pica la cabeza, revise el cabello de su hijo o hija, pues podría haber contraído piojos. Si es así compre un champú medicado a base de permetrinas para eliminarlos. Las liendres (huevos) pueden ser eliminadas con vinagre y un peine. Examine a los demás miembros de la familia.
Uso de peines y moños Enseñe a no compartirlos. También sería conveniente llevar su propia peinilla o cepillo a la peluquería. Es mejor realizarles a las hijas moños o trenzas, pues durante los juegos podría producirse el contagio de piojos.
Convenza a los niños de no sentarse en el suelo si están usando pantalones cortos, ya que pueden adquirir hongos o ciertos parásitos. Por la misma razón deben evitar caminar por los bordes de las piscinas, sin zapatillas (insistir a los instructores que les permitan utilizarlas).
No compartir toallas Explique a su niño que no debe compartir toallas, camisetas o pantalonetas, para evitar enfermedades en la piel.
Fuente: Dra. Blanca Almeida Jurado, dermatóloga.
Telfs.: (09) 945-4491, 244-7636
REVISIÓN VISUAL
Si tiene 3 o 4 años de edad su hijo, antes de que vaya a la escuela le pueden hacer un chequeo visual. Sus primeros cinco años son los más importantes en su desarrollo visual y cualquier trastorno en esta etapa puede incidir gravemente en su visión en el futuro.
Si nota que su hijo se acerca a los objetos, vira los ojos, presenta frecuentes dolores de cabeza (cefaleas), se frota los globos oculares, desvía los ojos con relativa frecuencia, lagrimea cuando ve TV, entre otros, no dude en llevarlo a un oftalmólogo.
Si el niño presenta algún problema visual, va a tener una baja escolaridad. Si es miope, tendrá inconveniente en visualizar a la distancia y se levantará a la pizarra. Y si es hipermetrope (al contrario al miope), va a tener problema al ver de cerca y dificultad en la lectura, y si sufre astigmatismo, presentará dolores de cabeza tanto a distancia como de cerca.
Chequeo de anteojos Una evaluación periódica de estos es primordial ya que el crecimiento del niño influye indudablemente en el aumento o disminución en la medida de sus cristales sea esta miopía o hipermetropía. Mas no el que presenta astigmatismo, donde no existe una variabilidad determinada.
Enseñe siempre a cuidar los lentes. No deben rayarlos y evitar la falta de transparencia en las lunas. También no morder las monturas.
Fuente: Dr. Juan Zúñiga Menéndez, oftalmólogo infantil.
Telf.: 239-0281